Debes guardar el ticket

Qué hacer si dañan mi coche en un parking público: a quién puedo reclamar

El usuario puede reclamar al titular del estacionamiento por los perjuicios que pueda sufrir el vehículo como consecuencia de desperfectos o averías dentro de la instalación.

Parking público
Párking público
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No saber a quién pedir explicaciones por un perjuicio es una situación lamentable y mucho más común de lo que cualquiera puede imaginarse hasta que le ocurre. Los parkings públicos no son sitios inmunes a estas ocurrencias, ya que innumerables personas se han encontrado con que sus coches muestran desperfectos, rasguños y hasta choques en sus vehículos que se producen sin testigos mientras se encontraban en otro lugar. En estos casos, es importante saber a quién dirigirse para realizar a reclamación.

Según la Ley 40/2002, de 14 de noviembre, el deber de restituir el vehículo en el mismo estado recae sobre el titular del parking público, que debe custodiarlo y vigilarlo para asegurarse de que se mantenga como entró. La ley excluye de estos casos a las zonas de estacionamiento regulado o en la vía pública y los parkings  que sean gratuitos o dependan de un local o instalación específicos. 

El usuario puede reclamar al titular del párking público por los daños que pueda sufrir el coche o moto como consecuencia de desperfectos o averías dentro de la instalación, como lo sería el desprendimiento y caída de un objeto sobre el mismo o una inundación, así como los daños a la integridad física sufridos por el mismo usuario y el robo del vehículo estacionado. En el caso de accesorios de valor que se encuentran dentro del vehículo, no se dan las mismas condiciones, ya que son responsabilidad del propietario.

Documentos necesarios para reclamar

Para ello, el propietario del vehículo debe guardar el ticket que prueba que estuvo en el estacionamiento, fotografiar los daños y rellenar la hoja de reclamaciones que debe ofrecer el párking, que además debe contar con una póliza de seguro con este fin. La vía judicial siempre es una opción en caso de que el empresario del párking se niegue a la reparación o indemnización por los perjuicios. 

De esta manera, cualquier perjuicio que sufra el coche o la moto entre el momento en que su propietario lo deja en el párking público y su vuelta, con el justificante apropiado, significa que la reparación corre a cargo del empresario que gestiona el sitio de manera que quede en el mismo estado que cuando entró en el mismo. 

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