La recuperación comienza a asomar sus debilidades. El impacto de la pandemia del Covid-19 durante este verano y las inundaciones registradas en el país han recolocado a Alemania en un escenario de incertidumbre económica a un mes de las elecciones generales. Así, la confianza empresarial bajó de nuevo en agosto porque los cuellos de botella en algunos productos para el sector manufacturero y el aumento de los contagios presionan a la economía, aunque se mantiene en máximos desde 2019.
El índice de confianza empresarial en el conjunto de Alemania del Instituto de Investigación Económica alemán (Ifo) cayó en agosto hasta 99,4 puntos, desde los 100,7 puntos revisados de julio. "El ánimo en la economía alemana se ha nublado de nuevo", dijo el presidente del Ifo, Clemens Fuest. La caída de la confianza empresarial en Alemania se ha producido principalmente por "un optimismo menos significativo en las expectativas de las empresas".
Aumenta la preocupación en los sectores de la hostelería y el turismo, según el Ifo. Sin embargo, las empresas consideraron que su situación actual es algo mejor que en julio. "Los cuellos de botella en el suministro de productos intermedios en el sector manufacturero y las preocupaciones por el aumento del número de infecciones presionan a la economía", añadió.
Después del índice ZEW y los PMI, el índice Ifo es el último indicador adelantado que apunta a una pérdida de impulso para la segunda mitad del año. "Hay varias explicaciones posibles para la actual pérdida de impulso de la economía. Solo piense en las inundaciones, los temores de la variante Delta, la incertidumbre política y de políticas o las fricciones en la cadena de suministro. Sin embargo, la explicación más fácil es probablemente simplemente el hecho de que el optimismo se excedió en la primavera y que algún tipo de realismo ha regresado", advierten los analistas de ING.
En el sector manufacturero, la confianza empresarial fue mucho peor porque bajaron la valoración de la situación actual y de las expectativas. Las perspectivas para los próximos seis meses de las empresas manufactureras alemanas han caído a mínimos desde noviembre de 2020, por el debilitamiento de la demanda.
La confianza empresarial ha bajado en agosto en el sector servicios también, así como en el sector del comercio porque los minoristas están especialmente preocupados por los próximos meses. Pero la confianza empresarial ha mejorado en el sector de las construcción. "Si bien el componente de evaluación actual mejoró al nivel más alto desde junio de 2019, las expectativas experimentaron su caída más pronunciada desde el inicio de la pandemia. En resumen, la mejora de la evaluación actual y la desaparición de las expectativas siguen siendo un buen augurio para el crecimiento en el actual tercer trimestre, pero apuntan a tiempos más difíciles a partir de entonces", recuerdan en ING.
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