La Justicia francesa confirma la condena contra Easyjet por discriminación

Actualiza la FD2031 con la reacción de Easyjet y de los minusválidos

París, 5 feb.- La Justicia francesa confirmó hoy la condena dictada contra la aerolínea Easyjet por discriminación hacia tres discapacitados, en la que se le obligó a pagar una multa de 70.000 euros.

El Tribunal de Apelación de París ratificó la sentencia dictada en enero del año pasado por el Tribunal de Bobigny, al norte de la capital, que había considerado un "ataque contra la dignidad humana" que la compañía de bajo coste impidiera el embarque a tres minusválidos por no ir acompañados.

Además de los 70.000 euros de multa, EasyJet tendrá que pagar 2.000 euros a cada uno de los tres demandantes en concepto de daños y perjuicios, y un euro simbólico a la Asociación de Paralíticos de Francia, que se constituyó como parte civil.

Los hechos por los que se dicta la condena tuvieron lugar en noviembre de 2008 y en enero de 2009 en el aeropuerto parisino de Charles de Gaulle, y la compañía argumentó en su defensa que tiene como política de empresa solicitar que los discapacitados viajen acompañados por motivos de seguridad.

Easyjet se refirió entonces a la reglamentación europea, en uno de cuyos artículos se contempla que se pueda exigir a un pasajero discapacitado o con movilidad reducida que vaya acompañado de otra persona que le garantice la asistencia, y negó haber tenido alguna intención discriminatoria.

El tribunal, según indicaron hoy a Efe fuentes judiciales, estimó hoy que esos puntos del reglamento comunitario son solo recomendaciones sin valor jurídico, e hizo valer la primera condena al considerar que Easyjet buscaba con su rechazo limitar sus gastos de funcionamiento.

La aerolínea británica rechazó "con el mayor vigor" las alegaciones de haber discriminado a los tres minusválidos y, en un comunicado, dijo reservarse la posibilidad de recurrir el dictamen ante el Tribunal Supremo.

Insistió en que "nunca ha discriminado a uno solo de sus clientes", pero que tiene que aplicar la normativa vigente, en virtud de la cual "no autoriza a ningún pasajero a viajar solo si no puede ir sin ayuda a una salida de socorro".

En ese sentido, señaló que las personas en silla de ruedas y no pueden caminar, mantenerse de pie o desplazarse por el avión sin asistencia, deben ir acompañados, e hizo hincapié en que "esa política se aplica de la misma forma ampliamente" por los otros operadores del sector, por eso dijo inquietarse por las consecuencias del dictamen de hoy.

Recordó, por otra parte, que cada año en sus aviones viajan cerca de 300.000 personas con problemas de movilidad, de los cuales menos de un 1 % necesitan tener un acompañante para su seguridad.

La Asociación de Paralíticos de Francia, por boca de su abogado, Patrick de la Grange, se felicitó por la sentencia, que constituye "un parón a las reglas discriminatorias para las personas minusválidas" a las que, subrayó en declaraciones a la televisión "BFM TV" que no se puede imponer "normas mas estrictas que a las válidas".