Montoro dice que España no es Grecia pero la lección "es muy clara"

Zaragoza.- El portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, ha afirmado hoy que España "no es Grecia", pero "la lección es muy clara", hay que "hacer los deberes en casa" y es necesaria la estabilidad presupuestaria y las reformas económicas para que el griego quede como un caso "aislado".

En declaraciones a los medios en Zaragoza, ha asegurado que el PP "celebra" la iniciativa de la Unión Europea de acudir al rescate de Grecia y la ayuda del Fondo Monetario Internacional, pero ha insistido en que es necesario que la situación que atraviesa Grecia "no se extienda" y España debe sacar "la lección" de que es en la estabilidad económica, en los presupuestos, en las reformas económicas, donde hay que evitar "cualquier clase de contagio".

De la situación de Grecia hay que extraer que España no tendrá más crecimiento y creación de empleo a través de más deuda pública, porque lo que hace es "lanzar una sombra de duda" sobre los mercados financieros internacionales y los acreedores, ha dicho Montoro.

"España tiene que decirle a Europa y al mundo que estamos en condiciones de pagar nuestra deuda externa" y, para eso, ha remarcado, es necesario un crecimiento económico que "no vendrá de más deuda pública ni de más impuestos".

Ha opinado que las medidas de ajuste aprobadas por el Gobierno en el último Consejo de Ministros, aunque estén "bien orientadas", son "claramente insuficientes" porque la situación está demostrando que "a través de la deuda pública no se sale de la crisis económica".

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ha agregado, "ha cometido un error" al negar la crisis y tratar de luchar contra ella aumentando la deuda pública y lo que hay que hacer, ha insistido, es "corregir" la política económica.

Entre otras medidas, ha apuntado, el PP defiende una reforma institucional del Estado que evite la duplicidad de competencias entre las administraciones central, autonómica y los ayuntamientos, se opone a la subida del IVA y apuesta por bajar impuestos "selectivamente" a los sectores que tienen que sacar al país de la crisis, especialmente a las pequeñas y medianas empresas y los autónomos.

Junto a ello, ha dicho, hay que sanear el sector bancario "para que vuelva a fluir el crédito", pero esa reestructuración "va lentísima", además de hacer reformas en el ámbito de la energía, en el mercado laboral y en relación con los estímulos a la innovación.

"En España necesitamos reformas económicas profundas", pero el Gobierno socialista es "claramente antisocial", porque ha promovido con su política que se perdieran dos millones de puestos de trabajo en dos años y lo que tendría que hacer es rectificar, algo que a su juicio "cada vez es más urgente" a la vista de lo que está ocurriendo en Europa y del caso griego.

Además, ha hecho hincapié en que nada es "gratis et amore" y el desarrollo de los servicios públicos no puede sustentarse en el aumento de los impuestos, porque los ciudadanos tendrán menos empleo, menos bienestar y menos capacidad de pagar tributos.

Por eso, el PP ha ofrecido al Gobierno "un gran pacto" para revisar la financiación de los grandes servicios públicos, hoy aquejados por la falta de ingresos por parte del Estado, pero el Ejecutivo "no quiere abordarlo".