Portugal asegura que la tripulación que llevó sirios a Lisboa fue coaccionada

  • El Gobierno de Portugal dijo hoy que las autoridades del aeropuerto de Bissau forzaron al comandante del vuelo de la aerolínea lusa TAP para transportar ilegalmente a Lisboa a los 74 sirios que pidieron asilo en Portugal este miércoles.

Lisboa, 12 dic.- El Gobierno de Portugal dijo hoy que las autoridades del aeropuerto de Bissau forzaron al comandante del vuelo de la aerolínea lusa TAP para transportar ilegalmente a Lisboa a los 74 sirios que pidieron asilo en Portugal este miércoles.

"Existió una coacción de las autoridades" al comandante del avión para el embarque de aquellas personas, "siendo cierto que había claramente una falsificación de los documentos de viaje", dijo el ministro de Presidencia, Luís Marques Guedes, al término del Consejo de Ministros.

Veintiún niños, 38 hombres y 15 mujeres procedentes de Siria, país que actualmente vive una situación de guerra civil, desembarcaron la noche del martes en el aeropuerto de Portela de la capital portuguesa procedentes de Bissau y solicitaron el asilo después de ser interceptados por las autoridades lusas.

A raíz de este incidente, la aerolínea portuguesa TAP, con el respaldo del Gobierno luso, suspendió la ruta entre las capitales Lisboa y Guinea Bissau, antigua colonia portuguesa que atraviesa un nuevo periodo de inestabilidad por el golpe de Estado de 2012.

"La decisión de suspender los vuelos (de la TAP a Guinea) está relacionada con una situación completamente incontrolable e inadmisible", destacó Marques Guedes.

La situación de los 74 sirios que pidieron asilo aún no está definida, según el ministro.

"La concesión o no del estatuto de refugiados obedece a procedimientos legales propios, no es algo que se pueda conceder ni de forma instantánea ni en 24 horas", señaló.

El ministerio de Exteriores de Portugal convocó ayer mismo al representante de Guinea-Bissau para transmitirle "la gravedad de lo sucedido".

Exteriores recordó que desaconseja los viajes a este pequeño país del África occidental, uno de los más pobres e inestables del mundo, y considerado una zona de paso de la droga con destino a Europa.

Desde el golpe de 2012 -perpetrado en el transcurso de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales-, la comunidad internacional ha condenado la falta de legalidad en el país.

Esta misma semana, la ONU pidió al gobierno de transición de Guinea Bissau que no retrase de nuevo las elecciones legislativas y presidenciales previstas para el 16 de marzo de 2014.

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