Nuevo dato relevante para el Banco Central Europeo (BCE), que analiza muy de cerca la evolución de los precios fijándose especialmente en la inflación subyacente, y en las tensiones estructurales, para determinar cuándo bajar tipos y flexibilizar la política monetaria. Este martes se ha conocido el dato adelantado de inflación correspondiente al mes de abril. Un elemento más para el análisis del BCE. En concreto, los precios en la Eurozona han crecido el 2,4% interanual, en línea con la subida de los precios observada en marzo, según el dato ha publicado hoy Eurostat.
Todo lo anterior, refuerza la previsión de que el BCE rebaje los tipos de interés el próximo mes de junio. En la actualidad, la tasa de referencia se sitúa en el 4,5%. Esto es la mayor desde 2001 y pondría fin al rápido endurecimiento de los tipos de interés iniciada en julio de 2022. La última subida de tipos por parte de la institución presidida por Christine Lagarde fue en septiembre del año pasado.
En este contexto resulta muy interesante cualquier movimiento de los precios. Por ejemplo, en el cuarto mes del año, la caída interanual de los precios de la energía se moderó al 0,6% desde la bajada del 1,8% en marzo, mientras que los alimentos frescos se encarecieron un 1,3%, después de bajar un 0,5% el mes pasado. Por su parte, el aumento anual del coste de los servicios se ha relajado al 3,7% desde el 4% de marzo, mientras que la subida del precio de los bienes industriales no energéticos se atenuó al 0,9% desde el 1,1%.
Cae la tasa subyacente
De este modo, la tasa de inflación de la zona euro al descontar el impacto de la energía habría sido del 2,7%, frente al 2,9% de marzo de 2024, mientras que al excluir también los alimentos, el alcohol y el tabaco, la tasa subyacente habría bajado al 2,7% desde el 2,9%.
Entre los países de la eurozona, las menores tasas de inflación interanual en abril han correspondido a Lituania (0,4%), Finlandia (0,6%) e Italia (1%), mientras que las subidas de precios más intensas se han registrado en Bélgica (4,9%), Croacia (4,7%), Austria y España (3,4% cada uno). De este modo, el diferencial de precios desfavorable a España respecto de la eurozona se ha ampliado en una décima, hasta un punto porcentual.
