Psoe. Los dirigentes del psoe llaman a la unidad interna tras el anuncio de zapatero y la previsión de primarias

Los dirigentes del PSOE han reaccionado al anuncio de José Luis Rodríguez Zapatero de no concurrir a un tercer mandato llamando a la unidad interna ante el proceso que se abrirá para elegir al nuevo candidato a la Presidencia del Gobierno para las elecciones de 2012.
Rodríguez Zapatero comunicó su decisión ante el Comité Federal, el máximo órgano de dirección del PSOE entre congresos, en una intervención abierta a los medios de comunicación a la que siguió un debate a puerta cerrada con 29 peticiones de palabra.
Todas las intervenciones iniciales coincidían, según los asistentes, en expresar el respeto a la decisión del secretario general y llamar a la unidad interna.
Todos coincidían en que esa unidad es la que permitirá al partido concentrarse en la tarea que tiene por delante, las elecciones municipales y autonómicas de mayo en primer término, y respaldar al Gobierno hasta el final de la legislatura, una vez que Rodríguez Zapatero ha dejado claro que la agotará.
El primero en tomar la palabra fue el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para quien Rodríguez Zapatero ha hecho “la expresión de confianza más alta en el partido” que ha visto nunca, con un comportamiento con el que ha estado “a la altura de un gran partido” y ahora el partido tiene que corresponder.
Griñán reconoció que su preferencia, y la de la federación andaluza, era que Rodríguez Zapatero hubiera sido de nuevo el cartel electoral del PSOE en 2012, pero expresó en todo caso su respeto por su decisión y la determinación de los socialistas andaluces de preservar la unidad y la estabilidad institucional.
El lehendakari, Patxi López, también secretario general de los socialistas vascos, pidió expresamente “unidad, inteligencia y decisión pensando en el colectivo” al afrontar los procesos internos que se abrirán tras las elecciones del 22 de mayo, en las que el partido tiene que estar unido “dando la batalla”.
En esos comicios los ciudadanos se juegan, en su opinión, el futuro del estado del bienestar, del estado autonómico, y la salida social de la crisis económica, y por ello el PSOE debe concurrir a ellas defendiendo “con orgullo” su ideología y sus valores.
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, uno de los más activos al pedir a Rodríguez Zapatero que despejara su futuro, le agradeció que haya hecho lo que el partido le pedía, precisando que era “despejar dudas, no que no te presentaras”. De hecho, le dijo, “si te hubieras presentado estaríamos todos contigo”.
Con su comportamiento, dijo Fernández Vara a sus compañeros de partido, Rodríguez Zapatero ha estado “a la altura de las circunstancias y a hora nos toca a nosotros estar a la alatura de las circunstancias, que es estar a la altura del partido”.
Hay que buscar “puntos de encuentro”, dijo el presidente extremeño, y eso está en los estatutos del PSOE y en la propia historia del partido.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, otro de los más activos reclamando un pronunciamiento a Rodríguez Zapatero, subrayó que los rumores cesan “cuando hay información y claridad, que es lo que tenemos ahora” porque el presidente ha dejado claro que seguirá siéndolo hasta el final de la legislatura y para elegir candidato el partido tiene claras sus reglas.
Muy breve fue el ex presidente de la Generalitat de Cataluña José Montilla, que expresó en nombre de los socialistas catalanes el respeto a la decisión de Rodríguez Zapatero y la petición de “unidad, cohesión y lealtad”.
Apoyo recibió también el presidente del secretario general de los socialistas asturianos, Javier Fernández, y del líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, que, pese a las diferencias entre ambos, acentuadas en las primarias en la Comunidad de Madrid, le expresó su afecto personal.
También lo hizo el valenciano Jorge Alarte, que pidió “responsabilidad” al partido para seguir respaldando al Gobierno y a su presidente, y para centrarse en las elecciones de mayo.
Muy gráfico fue el secretario general de los socialistas de Castilla y León, Óscar López, que llamó al partido a acudir a los comicios de mayo “orgulloso” de sí mismo, de sus candidatos, su gobierno y su presidente, y apeló a una “conjura colectiva” para ganar, el 22 de mayo y en las generales de 2012.