Recuperación, reformas y resultados

  • Virgilio Navarro Z.

Virgilio Navarro Z.

Madrid, 2 ago.- La recuperación, las reformas y los resultados han sido los términos más repetidos a lo largo de los últimos días en el sector económico, que sin embargo ha mirado de reojo cómo el pulso entre Argentina y los llamados "fondos buitre" permite aventurar un agosto más movido de lo previsto.

La deuda Argentina entró el pasado miércoles en lo que Standard & Poors llama "cese de pagos selectivo", un eufemismo para evitar decir suspensión de pagos y que Buenos Aires rechaza categóricamente. Su ministro de Economía, Áxel Kicillof, aseguraba que era "una pavada atómica".

Lo cierto es que el plazo para que el gobierno de Cristina Fernández y los fondos acreedores negocien ha concluido sin acuerdo y, pese a que las partes siguen sus contactos, la pelota está ahora en el tejado del juez federal neoyorquino Thomas Griesa, cuya imparcialidad ya se está poniendo en duda por parte de las autoridades argentinas.

El juez federal mantiene congelados los fondos que Argentina giró para pagar a los bonistas que aceptaron el canje de su deuda con una quita, al entender que debe pagarse a todos al mismo tiempo, tanto a los que aceptaron el canje (el 92,4 % del total) como a los que no lo hicieron, los "fondos buitres".

La situación afectó claramente a los mercados bursátiles, con caídas en el Ibex-35 del 3,44 % durante la semana, del 4,5 % en Fráncfort, del 2,69 en el S&P500, del 2,76 % en el Dow Jones o del 10,11 % en Lisboa, aunque en este último caso lastrado por los problemas del Banco Espírito Santo (BES).

El Banco de Portugal decidía a media semana suspender a tres administradores y despojar de los derechos del voto en el banco a sus principales accionistas, la familia Espírito Santo (BES), al detectar irregularidades en la gestión, que han llevado a presentar pérdidas por valor de 3.577 millones de euros. Sus acciones se desplomaban un 50 %.

En España, el presidente Mariano Rajoy hablaba el viernes, en su comparecencia de balance antes de las vacaciones de verano, de una recuperación sólida, anunciaba que se revisará al alza el PIB para 2014 (desde el 1,2 hasta el entorno del 1,5 %) y aseguraba que las reformas realizadas ya se trasladan a la creación de empleo.

Al comenzar la legislatura, aseguró Rajoy, el paro crecía a un ritmo del 12 % y, según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA), actualmente cae a un ritmo del 7 %. No obstante, las previsiones para cierre de 2014 todavía se encuentran por encima del 24 % de paro.

En cuanto a reformas, el Gobierno aprobaba en su última reunión antes de las vacaciones su reforma fiscal, con rebajas en el IRPF y en el Impuesto de Sociedades, así como un abaratamiento en las comisiones que pagan los partícipes en los planes y fondos de pensiones.

Buena parte de la oposición ve en esta reforma un intento de beneficiar a los que más tienen y pronostica que será en detrimento de políticas sociales y provocará nuevos recortes en educación y sanidad.

En cuanto a los resultados, las cuentas empresariales del primer semestre mostraron en términos generales una mejoría, aunque algunas -pese a reducir sus pérdidas- aún presentaban número rojos, como el gigante siderúrgico Arcelor (114,3 millones de euros) o FCC (52,7 millones).

Mejor le iba a entidades como el Santander, que elevó sus beneficios un 22 %, hasta 2.756 millones, o Bankia, que ganó un 93 % más, hasta 827 millones. BBVA o Telefónica reducían sus ganancias un 54 % y un 7,5 %, respectivamente.

En el ámbito internacional y en tono negativo, BP ganaba casi 7.000 millones de euros, un 64 % menos; Pfizer, 5.241 millones de dólares (-69 %); Samsung, 4.540 millones de euros (-20 %), o Barclays, 2.217 millones de euros (-14 %).

Por contra, los claros lucían para Exxon, que se anotaba unas ganancias de unos 18.000 millones de dólares, 9 % más; AXA, 3.000 millones de euros (+22 %); Bayer, 2.376 millones (+18,7 %), o Airbus, 1.135 millones (+50 %).

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