Rsc. Sin garantías de que el oro de los productos electrónicos no haya sido extraído por niños

Todo el mundo conoce que los dispositivos electrónicos y teléfonos móviles contienen pequeñas cantidades de minerales escasos y metales preciosos para su correcto funcionamiento, muchos de los cuales se extraen de minas situadas en zonas de conflicto o países en desarrollo con laxas normas laborales. De acuerdo con un reciente estudio realizado por la ONG DanWatch no hay ninguna garantía de que para la fabricación de estos productos no se hayan usado este tipo de materias primas extraídas por mano de obra infantil.
El informe Child mined gold in your mobile? profundiza en las condiciones laborales del sector minero de países como Ghana y Mali, a la vez que analiza la información facilitada por las principales compañías productoras de teléfonos móviles y ordenadores, en lo que a su cadena de suministro se refiere.
En estos últimos años se ha producido un aumento de la demanda de oro y por lo tanto de esta minería en Africa, donde existen han surgido un gran número de minas sin autorización y en donde no se produce un control de las condiciones laborales. Así, se estima que en Mali existen entre 20.000 y 40.000 niños trabajando en la extracción de oro.
En concreto, se han analizado las políticas de control de proveedores y la información que facilitan de Samsung, Apple, Nokia, RIM, HTC, HP, Acer, Leonvo, Asus, y Dell, y se les ha preguntado al respecto.
Aunque todas las empresas han respondido que tienen políticas o normas contra el trabajo infantil, así como que tienen en cuenta el uso de minerales en zonas de conflicto. Ninguna de ellas han podido garantizar que no tienen como fuente de suministro una de las pequeñas explotaciones de oro de Mali o Ghana.
El informe pone de relieve como debido a la falta de control de las condiciones laborales en estos países, los niños tienen un grave riesgo de envenenamiento por mercurio, que se usa para la extracción de dicho metal precioso. El mercurio ataca el sistema nervioso central y puede causar enfermedades crónicas incapacitantes, especialmente en niños, debido a que sus cuerpos se encuentran en fase de desarrollo y son más vulnerables a los metales pesados.