Un año de la invasión

La UE sustituye casi el 75% de las importaciones de gas ruso en un año

Las nuevas terminales de gas natural licuado (GNL) que se están desarrollando en Europa podrían proporcionar un 65% más de gas del que Rusia suministraba al Viejo Continente a finales de 2022.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin.
dpa vía Europa Press

La Comisión Europea (CE) presentó a principios de marzo su propuesta para reducir dos tercios las importaciones de gas de Rusia al año y lograr el objetivo de cortar su dependencia de los combustibles fósiles rusos en 2030. En el día en que se cumple un año de la invasión de Rusia a Ucrania, se puede decir que la Unión Europea (UE) ha conseguido sustituir casi el 75% de las importaciones de gas ruso en un año en comparación con los niveles anteriores a la crisis. 

Así lo muestra un nuevo análisis de Zero Carbon Analytics. Para hacerse una idea, los Veintisiete importaron 155.000 millones de metros cúbicos de gas de Rusia en 2021 entre envíos por gasoductos y barcos cargados con gas natural licuado (GNL). Además, el documento subraya que la demanda total de gas cayó un 10% tan solo entre enero y septiembre en comparación con el mismo periodo de 2021 y que para 2030 se prevé una reducción adicional del 43% en todo el bloque.

Otro punto que destaca en el informe es la nueva capacidad de GNL que se está desarrollando en el Viejo Continente. Las terminales que se están construyendo podrían proporcionar un 65% más de gas del que Rusia suministraba a finales del año pasado. Por ejemplo, Alemania ha construido su primera terminal flotante de GNL en poco más de seis meses. España lidera en este campo con casi un 30% de la capacidad de regasificación de Europa. La ventaja de poseer plantas regasificadoras es tener una mayor independencia energética, ya que estas permiten importar GNL en barcos procedentes de cualquier país. 

"Antes de su invasión de Ucrania, Rusia era con diferencia el mayor exportador mundial de petróleo y gas natural a los mercados globales. Desde entonces, su posición ha disminuido notablemente. Los flujos de gas por gasoducto de Rusia a Europa se han desplomado un 80% en solo un año. Las exportaciones de petróleo a los mercados mundiales solo han disminuido ligeramente hasta ahora, pero gran parte se vende con grandes descuentos y cada vez hay menos compradores en las economías avanzadas. Al mismo tiempo, las alternativas más limpias a los combustibles fósiles rusos están creciendo rápidamente, ya que los gobiernos tratan de reforzar su seguridad energética en medio de la crisis", señala el director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Fatih Birol.

Bajan los ingresos rusos

Bajo este escenario, los ingresos fiscales rusos procedentes del petróleo y el gas cayeron un 46% de enero de 2022 a enero de 2023. Asimismo, se calcula que las sanciones de la UE y sus aliados a los productos petrolíferos rusos cuesten al país que preside Vladimir Putin 280 millones de euros al día. Rusia perderá así más de un billón de dólares en ingresos por exportaciones de petróleo y gas de aquí a finales de la década, según la AIE. "Puede lograrse un impacto mucho mayor revisando los topes del precio del petróleo a niveles más cercanos a los costes de producción de Rusia: la UE y el G7 deberían actuar urgentemente en este sentido para apoyar la lucha de Ucrania", señala el analista del Centro de Investigación en Energía y Aire Limpio (CREA) Lauri Myllyvirta.

Myllyvirta destaca también que la política energética europea debe centrarse ahora en reducir la dependencia de los combustibles fósiles en general y lograr un cambio rápido hacia las energías limpias. "El aumento de las energías limpias debería permitir la prohibición total de las importaciones de combustibles fósiles de Rusia: la UE sigue importando de Rusia petróleo y gas por valor de unos 100 millones de euros al día, a través de oleoductos y GNL”, apunta.

En este sentido, bajo el marco del REPowerEu, la UE tiene la intención de movilizar hasta 300.000 millones de euros de inversión, de los que 10.000 millones se destinarán a infraestructura gasísticas, 2.000 millones a petróleo y el resto a energía renovable. En concreto, 75.000 se movilizarán en forma de subvenciones y 225.000 mediante préstamos.

Por otro lado, el análisis de Zero Carbon Analytics resalta que la generación eólica y solar de la UE aumentó un 13% en los meses posteriores a la invasión rusa y que, gracias a este aumento récord de la producción de electricidad 'verde', el bloque comunitario ahorró el equivalente a 11.000 millones de euros de gas fósil importado. En este sentido, coparon un 22% del mix energético europeo en 2022, superando por primera vez al gas fósil (20%) y quedando muy por delante del carbón (16%), que ha resurgido en algunos países. Según un estudio de Ember, la producción de combustibles fósiles en Europa podría caer un 20% este año.

Asimismo, Zero Carbon Analytics pone en valor el despliegue de las bombas de calor en Europa, con un incrementos de las ventas del 120% en Polonia, del 100% en Eslovaquia y Bélgica, y del 50% o más en Finlandia, República Checa y Alemania. La espiral de costes ha disparado los beneficios de las grandes petroleras como consecuencia del aumento de las facturas energéticas que, según un estudio publicado en Nature Energy, podrían empujar a la pobreza extrema hasta 141 millones de personas más en todo el mundo.

Mostrar comentarios