Bankinter ha cerrado 2020 con unos beneficios de 317 millones, un 42,4% menos que en 2019, según los datos comunicados este mismo jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El golpe del coronavirus ha llevado a provisionar en el conjunto del año hasta 242 millones de euros para anticipar los daños en el escenario macroeconómico. La entidad financiera que encabeza María Dolores Dancausa consiguió aumentar los márgenes y mantener la ratio de mora en un año de gran incertidumbre.
De las dos principales patas del grupo, el resultado de la actividad bancaria recurrente fue a cierre del ejercicio de 473 millones de euros, un 13,2% inferior al de 2019. Por su parte, el resultado antes de impuestos de Línea Directa, para la que la entidad prepara la salida a bolsa, alcanzó los 179,6 millones de euros, un 25,7% más que hace un año.
Bankinter ha conseguido mantener la rentabilidad sobre recursos propios, ROE, en el 7%, cifra que sería del 10,8% sin tener en cuenta el impacto de las provisiones extraordinarias. Este dato supone una caída de seis puntos porcentuales. Además, la entidad naranja ha reforzado durante este ejercicio la solvencia, con una ratio de capital CET1 fully loaded que se sitúa en el 12,3%, frente al mínimo del 7,7% exigido por el BCE en función del tipo de negocio que realiza la entidad y sus niveles de morosidad.
Uno de los indicadores que más preocupan de cara a conocer las consecuencias de la pandemia es la ratio de mora. A este respecto, el banco que capitanea Dancausa ha conseguido mantener su tendencia descendente hasta alcanzar el 2,37% frente al 2,51% de hace un año, casi la mitad que la media sectorial. Por su parte, la cobertura de la morosidad ha crecido hasta el 60,5%, casi doce puntos desde el cierre de 2019.
Los márgenes han sufrido un importante empujón en 2020 y han cerrado en verde. El margen de intereses alcanzó los 1.247 millones de euros, un 6,8% más que en 2019, gracias sobre todo a los mayores volúmenes de la inversión. Al mismo tiempo, el margen bruto se situó en 1.709 millones de euros, lo que significa un 3,6% más que hace un año. La aportación de las comisiones a ese margen bruto es de un 29%, o lo que es lo mismo, 496,8 millones de euros, de los que 157 millones proceden del negocio de gestión de activos y 98 millones del negocio de valores.
Es precisamente el negocio de gestión de valores el que ha resultado clave para conseguir estas cifras, pues ha cerrado el ejercicio con un aumento del 22% con respecto a diciembre de 2019. El margen de explotación antes de provisiones concluye el ejercicio en 880,2 millones de euros, un 4,5% más que hace un año, con unos costes operativos que se incrementan en un 2,7% debido sobre todo a las nuevas inversiones en los negocios adquiridos.
En cuanto al balance, Bankinter también ha cerrado el año con avances. Los activos totales del grupo ascendieron a 96.252,1 millones de euros, un 15% más que en 2019. La inversión crediticia a clientes también cerró en positivo, con 64.384,3 millones de euros, un 6,6% más. Especialmente relevante fue el crecimiento de la inversión en España, donde sin tener en cuenta EVO Banco, fue del 6,1% frente a un 2,4% de media del sector.
8.600 millones en préstamos con aval ICO
Las medidas de apoyo público para prevenir las consecuencias económicas de la pandemia han tenido su efecto. Si se pone en el foco en el negocio de Empresas, la cartera de inversión crediticia alcanzó al cierre de año 28.400 millones de euros, un 11% más que hace un año. En ese crecimiento han tenido un fuerte protagonismo los préstamos avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), con 8.600 millones de euros formalizados, de los que 6.000 millones han sido ya dispuestos.
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