El duque de Westminster quiere hacer de Chamberí el nuevo barrio de Salamanca

  • Mientras las fortunas latinoamericanas se decantan por el ala este de la Castellana, ellos pujan por la otra orilla con el fondo malayo Amprop.
Fachada de General Arrando.
Fachada de General Arrando.
Grosvenor

El distrito madrileño de Chamberí ha sido históricamente una de las cunas del 'casticismo madrileño'. Y esto es precisamente lo que ha atraído al séptimo duque de Wetsminster, el joven Hugh Grosvenor, que se ha decantado por este enclave de la capital que integra seis barrios (Gaztambide, Arapiles, Trafalgar, Almagro, Ríos Rosas y Vallehermoso) y tiene una población cercana a los 150.000 habitantes. 

A este joven aristócrata se le puso cara socialmente en 2013 cuando fue elegido por los duques de Cambridge, Guillermo y Kate, para ser uno de los padrinos de bautismo del príncipe Jorge. Y es que en 1979, Gerald Cavendish pasó a formar parte del círculo íntimo de la Reina de Inglaterra gracias a su matrimonio con la noble Natalia Ayesha Phillips, una descendiente del Rey Jorge II. La filosofía de Grosvenor Group Limited, nacido en Londres en 1677, en Madrid es clara: "Exclusividad frente a lujo trufado con vida de barrio", apuntan desde esta compañía británica.

La muerte de su padre, Gerald Cavendish Grosvenor, el 9 de agosto de 2016,  convirtió a este lord de 26 años en el propietario del 0,22% del suelo del Reino Unido. En total, sus propiedades valen 8.000 millones de euros, y sus activos gestionados, casi 15.000 millones.  A cierre de 2017, Grosvenor Europe contaba con una cartera de activos bajo gestión valorada en 2,7 billones de euros. 

Grosvenor posee terrenos en Cheshire, Oxford, Escocia y, sobre todo, en Mayfair y Belgravia, dos de los barrios con el suelo más caro de Londres. En las ciudades elegidas pone su sello. Desde Liverpool (Liverpool One) a Tokyo ( The Westminster Nanpeidai en Shibuya) o al  Skärholmen Centrum de Estocolmo pasando por sus condominos en Alberta (Canadá), Silicon Valley o San Francisco, en Estados Unidos. En Madrid tiene abiertas tres promociones en el barrio de Chamberí: la exclusiva esquina de General Arrando, Modesto Lafuente 26 y García de Paredes 4. En Arrando, la más cara de las tres promociones, los precios parten desde 1,6 millones y estudios desde 425.000 euros.  En el resto, rozan el millón. 

Fachada de la vivienda de General Arrando, Madrid
Fachada de la vivienda de General Arrando, Madrid / Grosvenor

El aliado de Malasia 

Aunque ha adquirido un inmueble en el barrio Salamanca (Jorge Juan 53), su preferencia es este barrio que desde el siglo XVII se reparte entre la Iglesia, los nobles, la monarquía y campesinos acomodados. Grosvenor tiene querencia histórica por nuestro país, especialmente en el mercado residencial de lujo, donde prevé invertir 200 millones de euros en proyectos. Pretende dedicar otros 100 a la adquisición y rehabilitación de nuevos inmuebles en año y medio. 

El crecimiento en el residencial español ha ido de la mano del grupo malayo Amcorp Properties Berhad (Amprop), con quien creó una 'joint venture' a finales de 2016. Amprop es un viejo aliado de Grosvenor, con el que opera también en otros grandes mercados como el de Tokio e Inglaterra. Para dirigir la gestión técnica de las operaciones que realice en el país cuenta con un español. El fondo fichó a Javier García, un exdirectivo de Bouygues y Typsa.

Promoción de Jorge Juan de Grosvenor.
Promoción de Jorge Juan de Grosvenor. / Grosvenor

De la finca al polígono (VIP)

Desde esta compañía aseguran que la "la historia de Chamberí y sus inmejorables conexiones son de un gran atractivo tanto para los vecinos que han vivido allí toda la vida, como para locales de restauración y ocio, que empiezan a convertir a la zona de Almagro en uno de los lugares con más encanto de la ciudad". El joven noble lo sabe bien, ya que conoce desde niño España. Su compañía es la dueña de La Garganta, el mayor latifundio (15.000 hectáreas) de la península ibérica situado en el Valle de Alcudia en Ciudad Real

La propiedad tiene helipuerto, iglesia, escuela, un hospital de primeros auxilios y varios inmuebles palaciegos en su recinto. Son históricos los problemas con la localidad de Minas de Horcajo, que está dentro de la propiedad y fue abandonada. Sin embargo, un controvertido acuerdo con el Ayuntamiento de Almodóvar del Campo permite circular libremente por una ruta que permite entrar en Minas de Horcajo a pesar de los carteles que avisan que es propiedad privada.

Grosvenor también está mostrando apetito por el terciario. Según ha adelantado 'El Confidencial', el joven noble es ahora también el propietario del edificio MB One, famoso por ser sede de Citi en La Moraleja (Alcobendas, Madrid), por un importe cercano a los 80 millones de euros.

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