Del rey de las tapas a ¿el rey del juego? La franquicia de las "tapas gratis" con la bebida que se extiende por todo Madrid bajo el nombre de 'Indalo' ha visto -como muchas otras firmas que crecen en los barrios de las grandes ciudades- un futuro a través del juego y las apuestas y no ha querido dejar de unirse a la ola, incluyendo en su modelo de negocio futuro este nuevo concepto.
Por ello, la empresa que nació en Alcalá de Henares ha unido a su tradicional objeto social -"la explotación, gestión, desarrollo , intermediación y asesoramiento de actividades relacionadas con las "franquicias", hostelería, restaurantes y otras actividades análogas"- la gestión y comercialización de juegos del Estado, tal y como ha informado a través del Boletín Oficial del Registro Mercantil este mismo martes.
La cadena de bares creció en Madrid gracias a su estrategia de negocio de servir una tapa gratis a elegir con cada consumición, lo que le ha servido para cumplir más de 30 años en el mercado. Desde entonces, ha sabido expandirse y ha día de hoy cuenta con una docena de locales -la mayoría de ellos en Madrid-.
De este modo, Indalo Tapas se convertiría en otra empresa más en sumarse al 'boom' de las casas de apuestas y la venta de loterías que se están acomodando en España, sobre todo en los barrios más humildes, cada vez más. La proliferación de este tipo de locales se ha notado de forma muy importante en los últimos meses y con ella también ha aumentado la facturación de todas las modalidades de juego.
En la vertiente 'online', aquella a la que recurren miles de jóvenes cada día para saciar sus ansias de juego, consiguió mover hasta 4.251 millones de euros solo en el tercer trimestre de 2018, último del que hay datos, un 2,04% más que en el periodo inmediatamente anterior. En este segmento hay actualmente hasta 52 empresas de este tipo en activo.
Hace unos meses, uno de los barrios más representativos de Madrid, Tetuán, celebraba una multitudinaria manifestación en contra de este tipo de locales bajo el lema de 'Tetuán no es un casino' y las cifras dan la razón a la población. En los últimos años, este tipo de establecimientos han aumentado en un 300% en la Comunidad de Madrid por lo que zonas como Vallecas, Ciudad Lineal o Usera han visto sus calles inundadas de 'mini casinos'.
Las asociaciones contra la ludopatía ya advierten de los efectos que puede tener el aumento de este tipo de establecimientos y confirman que está resucitando el grave problema social que, sobre todo entre los jóvenes, es la adicción al juego. De hecho, las cifras también muestran que este problema ha aumentado desde el estallido de la burbuja del juego.
Tal daño está haciendo este 'boom' que varios partidos políticos intentaron durante meses -por ahora sin éxito- la imposición de gravámenes especiales para las apuestas deportivas, las más activas del sector. Su fin era incluirlo en los Presupuestos Generales del Estado, pero finalmente, al tratarse de una competencia cedida a las autonomías, se ha quedado en agua de borrajas. Al menos por ahora.
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