Los sectores asociados a lo militar se encaminan a vivir sus años dorados por la proliferación de conflictos globales y los compromisos políticos de inversión en armamento. La facturación total del sector de la Seguridad, Defensa, Aeronáutica y Espacio, que aglutina la asociación TEDAE, aumentó el año pasado hasta los 12.135 millones de euros, aunque aún sigue casi un 16% por debajo de los niveles prepandemia, y con perspectivas de una fuerte subida este 2023.
Entretanto, uno de los grandes valores añadidos de la industria se ha mantenido y ha aguantado mejor que otros grandes sectores industriales, ya que el de las armas, aviones y elementos de seguridad se han consolidado como las grandes empresas tractoras de la innovación.
La inversión directa de las empresas de Seguridad, Defensa, Aeronáutica y Espacio en I+D+i creció un 4,43% frente a los datos de 2019 hasta los 1.177 millones en 2021; mientras que las otras grandes manufacturas, los vehículos de motor y las farmacéuticas, han reducido en un 34% y casi un 24%, respectivamente, sus inversiones frente al año prepandemia hasta los 814 millones y 782 millones, según los últimos datos elaborados por KPMG y TEDAE publicados este martes.
Además, las empresas agrupadas en torno a la seguridad y la defensa son de las pocas que han aumentado su impacto sobre la innovación, ya que frente a las caídas del motor y de farma, tan solo han conseguido aumentar sus niveles de inversión desde la pandemia el sector químico -que se mantiene prácticamente igual con respecto a los niveles prepandemia, aunque con un impacto significativamente inferior al de la defensa con 332 millones de euros- y la industria manufacturera metálica, con un crecimiento de casi el 10% hasta los 178 millones de euros.
Los datos presentados este martes por KPMG y TEDAE sobre innovación, desarrollo e investigación representan los últimos registros disponibles en el Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2021. No obstante, los propios autores del informe advierten que en 2022 el impacto directo en I+D+i descendió hasta los 1.169 millones de euros. No obstante, las cifras del sector siguen siendo destacadas y desde la asociación afirman que el objetivo es "incrementar la inversión en proyectos de I+D+i, fomentar el desarrollo de una cooperación y estrategia conjunta de los miembros de la UE y facilitar la adquisición conjunta de capacidades de defensa".
De la oportunidad a la realidad
El teniente general Fernando Miguel García y García, jefe del Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE) y el director general de Armamento y Material (DIGAM) del Ministerio de Defensa, Aniceto Rosique, acudieron a la presentación y no ocultaron su optimismo con respecto a las perspectivas de inversión en la industria tras un periodo presupuestario "de mucha austeridad", al que ahora se contrapone el compromiso de Gobierno y oposición de alcanzar el 2% del PIB en inversión militar.
"Estamos confiados", confesó García y García. "Si en la época anterior de austeridad hablábamos de colaboración pública privada con un espíritu voluntarista, ahora tenemos que ser deterministas" para "hacerlo mejor en tiempo récord", aseguró el teniente general.
Impacto sobre el PIB
Las empresas de TEDAE, en las que se incrustan Indra o Airbus, aportaron al PIB en 2022 unos 17.392 millones de euros, el 1,31% del total nacional, teniendo en cuenta los efectos directos, indirectos e inducidos. Además, su contribución sobre el PIB industrial es del 6%. En cuanto a la recaudación fiscal de las compañías que forman TEDAE, el informe la estima en 2.610 millones de euros, lo que representa un 1% de la recaudación nacional.
En lo que respecta al empleo, el informe estima que emplea de manera directa e indirecta a 211.000 personas -53.541 de ellos directos-, con un salario medio un 85% superior a la media nacional hasta los 3.522 euros mensuales -frente a los 1.907 de la media nacional-, según datos del INE de 2021.
