El mayor gestor de patrimonios del mundo, el suizo UBS, ha superado ampliamente las expectativas del mercado al anunciar un salto de su beneficio neto del 99% entre julio y septiembre, en relación al mismo periodo del año anterior, hasta los 2.100 millones de dólares (1.782,85 millones de euros). Así, la entidad se sobrepone a la crisis generada por el coronavirus y ha logrado cerrar su mejor tercer trimestre en una década.
Los analistas preveían que el banco helvético y la gestora de activos reportasen unas ganancias netas en el entorno de los 1.500 millones de dólares, por lo que las cifras publicadas esta mañana superan ampliamente las expectativas de los principales consensos. En su nota de resultados, UBS indica que el beneficio antes de impuestos para el período se incrementa un 92% hasta los 2.600 millones de dólares (2.207,66 millones de euros).
El beneficio operativo o EBITDA alcanzó los 8.900 millones de dólares (7.556,99 millones de euros) entre julio y septiembre, frente a los 7.080 millones de dólares que consiguió recabar hace justo un año. La ratio de capital CET 1, principal medida de fortaleza financiera usada por el regulador bancario, alcanzó el 13,9%, frente al 13,1% de hace un año.
El beneficio antes de impuestos en el banco de inversión de UBS aumentó un 268%, tras la volatilidad del mercado a raíz de la crisis del coronavirus. Mientras que su división de gestión de patrimonio registró un aumento del 18% en el beneficio antes de impuestos, y los activos invertidos totales alcanzaron un máximo histórico para la firma de 2.750 millones de dólares (2.335,03 millones de euros).
Este fuerte incremento de las ganancias tiene lugar después de que el beneficio neto del segundo trimestre se hundiese un 11% a causa de la crisis de la Covid-19, que ha azotado a la banca de todo el mundo y la ha obligado a elevar con fuerza sus provisiones ante la perspectiva de que la crisis del coronavirus pueda dar lugar a un incremento notable de la morosidad.
El banco atribuye estas cifras a la fuerte actividad de los clientes y a los "beneficios de un modelo de negocio bien diversificado con una amplia combinación regional". En opinión de su CEO, Sergio Ermotti, los resultados de UBS "siguen demostrando" que su estrategia los está "diferenciando" a medida que se adaptan a los cambios. Ermotti abandonará el puesto de CEO este mismo mes y será sustituido a partir del próximo 1 de noviembre por Ralph Hamers.
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