Esta conversación ha estado precedida de la reunión que mantuvieron ayer en la sede del Ministerio del Interior representantes de la Secretaría de Estado de Seguridad y del Departamento de Interior de la Generalitat, en la que se avanzó considerablemente sobre el orden del día de la Junta de Seguridad, un órgano político que hacía ocho años que no se convocaba.
Al encuentro, que se desarrolló en un clima de máxima colaboración, según destaca Interior, asistieron el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto; el director del Gabinete de Coordinación y Estudios, Diego Pérez de los Cobos; el secretario general de la Consellería de Interior de la Generalitat, Cesar Puig, y el director de los Mossos d'Esquadra, Albert Batlle.
El 10 de julio fue junto al 5 de este mes las dos fechas que había propuesto Jordi Jané para que se celebrara dicha reunión después de que Zoido rechazara que se convocara el día 3, como anunció el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. El ministro remitió una carta el 21 de junio en la que explicaba que este último día tenía fijado una reunión del G-4 con sus homólogos de Francia, Portugal y Marruecos.
Zoido ha insistido en que existe un "excelente funcionamiento de la coordinación" entre los diferentes cuerpos policiales, al margen de la convocatoria de la Junta de Seguridad, un órgano político que, de acuerdo al Estatut, preside el jefe del Ejecutivo catalán. "Tenemos que alcanzar un consenso definitivo sobre el orden del día, que debe incluir cuestiones que sean factibles y que hagan posible alcanzar acuerdos que se puedan cumplir, ya que no podemos permitirnos ningún fracaso en materia de seguridad", argumentó el ministro.
NUEVAS PLAZAS DE MOSSOS
Las discrepancias entre el Ministerio del Interior y el Departamento del Interior catalán se han escenificado también en la convocatoria de 500 nuevas plazas en la escala básica de los Mossos d'Esquadra, lo que motivó que el Ministerio de Hacienda remitiera a la Generalitat un requerimiento al incumplir la normativa estatal sobre la tasa de reposición de funcionarios.
El diputado de ERC Gabriel Rufián llamó en el Congreso a Zoido "miserable" e "irresponsable" por no concretar la fecha de la Junta de Seguridad y por pedir que las plazas de nuevos mossos se ajustaran a la ley. En los últimos días, el ministro ha redoblado sus mensajes pidiendo "sensatez" para que no se "juegue a la política" con la seguridad de los ciudadanos.
El titular del Interior se mostró sorprendido por las críticas de dirigentes catalanes tras el acuerdo alcanzado con el Departamento Vasco de Interior en la Junta de Seguridad celebrada en Vitoria el 14 de junio. En dicha reunión, se acordó que la Ertzaintza amplíe su acceso a las bases de datos europeas y que realice las denominadas 'persecuciones en caliente', las que permiten entrar por tierra en otro país para capturar a un fugitivo.
Durante aquel encuentro, Gobierno central y vasco se comprometieron a "clarificar" las competencias de los distintos cuerpos de seguridad, aunque Zoido advirtió de que "hoy por hoy" no se dan las condiciones para reducir el número de policías nacionales y guardias civiles desplegados en Euskadi, tal y como ha reclamado en numerosas ocasiones el Ejecutivo vasco.
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