Pedro Sánchez sigue de diputado y sus fieles dicen: "Hemos perdido una batalla pero no la guerra"

Pedro Sánchez no se va. Quienes piensen que su comparecencia del sábado es un adiós se equivocan. El exsecretario general del PSOE va a continuar defendiendo su postura. Y, para ello, cuenta con un nutrido grupo de dirigentes que le rodean y con un importante volumen de la militancia.

Los fieles de Sánchez dicen: "Hemos perdido una batalla, pero no la guerra". "Seguimos, no nos vamos a ir", añaden. Aseguran que la renuncia de otros exsecretarios generales en el pasado no es comparable con la dimisión de Pedro del sábado.

Es decir, que a lo único que ha renunciado Sánchez es a ser secretario general del PSOE. Mantendrá su acta de diputado, tal y como acaba de confirmar este lunes en Twitter:Tengo un compromiso con los electores y voy a seguir trabajando desde mi escaño de diputado para mejorar la vida de los ciudadanos.— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) October 3, 2016

El ya diputado raso socialista se ha limitado en un segundo mensaje a reivindicar el papel de la militancia en el partido:Hoy más que nunca la militancia del @PSOE es lo más importante. Sois la voz de este partido. Debemos permanecer unidos.— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) October 3, 2016

Sánchez tiene intención de continuar peleando por sus ideales. Es más, en su entorno se da por seguro que se presentará a las futuras primarias. Por si fuera poco, en el PSOE ya se ha empezado a hablar de una "operación mártir", es decir, empieza a ser visto como una víctima de una conspiración auspiciada por Susana Díaz, Felipe González y algunos medios de comunicación.Miles de apoyos a Pedro

Pedro se siente respaldado no solo por sus fieles, sino por un importante número de afiliados y militantes. El ambiente en las puertas de Ferraz era de unanimidad con la postura de Sánchez. Allí había bases que habían venido desde Cataluña, Extremadura o, incluso, Andalucía.

Durante el fin de semana Pedro Sánchez ha recibido miles de mensajes de apoyo en WhatsApp y en redes sociales. Le pedían que no se marchara y que continuara. Venían a decir: por favor, no nos abadonéis. 

El domingo, Pedro Sánchez estuvo con su familia encerrado en su casa de Somosagüas. Estaba cansado después de la batalla del sábado en Ferraz y decidió descansar con los suyos.