Acusado de poner foto de etarra dice que quiso "personalizar" el acercamiento

  • El acusado de colocar una pancarta con la imagen de un preso etarra en Azpeitia (Guipúzcoa) en julio de 2011, Aritz Arzallus, ha dicho que lo hizo durante una concentración autorizada por la justicia y para "personalizar" la reivindicación de familiares de los reclusos de ETA para su acercamiento.

Madrid, 26 jun.- El acusado de colocar una pancarta con la imagen de un preso etarra en Azpeitia (Guipúzcoa) en julio de 2011, Aritz Arzallus, ha dicho que lo hizo durante una concentración autorizada por la justicia y para "personalizar" la reivindicación de familiares de los reclusos de ETA para su acercamiento.

Así lo ha manifestado Arzallus durante el juicio celebrado ante la sección segunda de la Sala de lo Penal de este tribunal, en el que la fiscal Teresa Sandoval ha mantenido su petición de un año y medio de prisión para él por un delito de enaltecimiento del terrorismo.

El acusado, que sólo ha respondido a su defensa, ha incidido en que durante las fiestas de Azpeitia del año pasado, como en todas las ediciones, la asociación de familiares de reclusos de ETA, Etxerat, organizó una concentración para reclamar el acercamiento de sus presos a las cárceles vascas.

Ha reconocido que él ayudó colocando una pancarta con el lema "Herrira" (Al pueblo) junto con la fotografía del etarra Gotzon Aramburu, preso en la cárcel de Villena (Alicante) y avisando a la Ertzaintza de que se iba a producir la concentración, que había sido autorizada por el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, sin perjuicio de acordar "su control y vigilancia".

Por ello, sabía que iba a ser custodiada por la Ertzaintza y ha insistido en que no sabía que podía estar incurriendo en un delito de enaltecimiento del terrorismo al colocar la pancarta, cuya posición había sido decidida por los familiares y ciudadanos del pueblo.

Aunque también era consciente de que Aramburu había sido condenado por pertenencia, ha precisado que con su imagen se trataba de "personalizar la reivindicación", y ha subrayado que, pese a que la concentración estaba siendo vigilada y que, de hecho, transcurrió sin incidentes, nadie le ordenó retirarla.

Sin embargo, para la representante del Ministerio Público, aunque la reivindicación del acercamiento es legítima, la conducta de Arzallus es ilícita porque era "perfectamente consciente de que la pancarta loaba y ensalzaba" a la banda terrorista.

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