La Audiencia absuelve a 17 acusados de formar parte del clan ruso Tambovskaya

  • No ha quedado probado que integraran una organización criminal que blanqueaba dinero provenientes de la comisión de asesinatos y palizas.
Gennadios Petrov, el jefe de la organización rusa
Gennadios Petrov, el jefe de la organización rusa

La Audiencia Nacional ha absuelto a los 17 acusados en el juicio de la llamada operación 'Troika’ al no quedar acreditado que prestaran su cooperación con la ‘Tambovskaya’, una de las presuntas mafias rusas más peligrosas asentadas en nuestro país.

En la sentencia, que se conoce siete meses después del fin de la vista oral, la Sección Tercera de la Sala de lo Penal concluye que no ha quedado acreditado que los acusados, entre los que se encuentra el diputado de la Duma Vladislav Matusovich Reznik, prestaran su colaboración para gestionar desde España capital procedente de cuentas bancarias en el extranjero fruto de actividades delictivas como la comisión de asesinatos, palizas por encargo, contrabando o tráfico de drogas.

La Fiscalía Anticorrupción rebajó la petición de cárcel para 14 del total de los acusados con penas que oscilaban entre el año y siete meses de cárcel y los cinco años y medio de prisión por los delitos de asociación ilícita y blanqueo de capitales. El juicio no se pudo celebrar contra todos los detenidos puesto que algunos se encuentran huidos de la Justicia, como es el caso del presunto capo de esta mafia, Gennadios Petrov.

Los hechos probados relatan que en el año 1996 Petrov, junto con Viktor Gabrilenkoz y Serguei Kouzmine (también en rebeldía) se trasladaron a España estableciéndose en Marbella y ocupando chalets contiguos. En la década de 1990 se instalaron igualmente en Málaga los también ciudadanos rusos Alexander Malyshev y Olga Solojeva, presuntos lugartenientes de los anteriormente nombrados y a quienes tampoco se jugaba en esta causa.

“Todos ellos se conocían y desarrollaron tanto en España como en el extranjero actividades empresariales, crearon sociedades mercantiles y recibieron capitales procedentes de cuentas bancarias abiertas en distintos países que invirtieron en España, para lo que en ocasiones contaron con los servicios de asesoría jurídica y de la asistencia de traductoras del idioma ruso y secretarias”, relata la Sala, si bien concluye que no se ha podido demostrar que todo esto se hiciera con capital de origen ilícito.

“Verdadera crisis kafkiana”

La última sesión del juicio que acogió la Audiencia Nacional entre los meses de febrero y abril estuvo dedicada al turno de última palabra que hicieron totalidad de acusados, quienes pidieron su absolución y denunciaron que habían vivida una “verdadera crisis kafkiana” desde su detención hace ahora diez años.

Diana Guidin, la mujer del diputado ruso miembro del partido de Vladimir Putin, fue más allá y expuso a los magistrados miembros del tribunal que si hace doce años le hubieran dicho que se le iba a imputar estos delitos "hubiera creído más probable" que le cayera un "asteroide en la cabeza".

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