Azores elige a nuevo presidente tras 16 años con Carlos César en el Gobierno

Oscar Tomasi

Lisboa, 13 oct.- El archipiélago portugués autónomo de las Islas Azores elige mañana a un nuevo presidente del Gobierno regional después de que el inquilino durante sus últimos 16 años, Carlos César, diera un paso atrás y decidiese no volver a presentarse.

Unos 225.000 electores -de los cerca de 246.000 habitantes que viven en las nueve islas que forman las Azores- están llamados a escoger mañana entre la continuidad que encarna el nuevo aspirante del Partido Socialista (PS), Vasco Cordeiro, y el cambio que representa la socialdemócrata (PSD, conservador) Berta Cabral.

Ambos partidos son los que según sondeos y expertos se disputan la victoria final en el archipiélago, situado en medio del Océano Atlántico, a unos 1.500 kilómetros de Lisboa, y la única región junto con Madeira que cuenta con autonomía y Gobierno propio en Portugal.

La campaña ha estado marcada por la severa crisis que afecta a todo el país y sus efectos en las Azores, que solicitó recientemente ayuda a Lisboa por sus dificultades para acceder a financiación, el mismo problema que llevó a Portugal a pedir el año pasado el rescate a la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional.

El sociólogo e investigador del Centro de Estudios Sociales de las Azores Alvaro Borralho explicó hoy a Efe que la fuerte recesión que vive Portugal se ha reflejado en una reducción del flujo de turistas nacionales llegados a la región, lo que supone ver mermada una sus principales fuentes de ingresos.

Las encuestas dan como vencedor al sucesor del hasta ahora presidente, el nuevo aspirante socialista Vasco Cordeiro, quien ya fue miembro de su Ejecutivo durante las últimas legislaturas.

Entre las peculiaridades electorales de las Azores destaca el hecho de que en ocho de los nueve comicios legislativos celebrados desde la llegada de la democracia (1974) el triunfador ganase con mayoría absoluta, debido en parte al sistema electoral que rige en el archipiélago, según apuntó Borralho.

En las cinco primeras elecciones regionales se impusieron los socialdemócratas, mientras que desde 1996, las victorias se suceden para el PS.

"No preveo cambios sustanciales si gana Vasco Cordeiro respecto a la política seguida por Carlos César", señaló el sociólogo luso.

Otra de las características que definen el comportamiento electoral de los habitantes de las Azores es su elevado índice de abstencionismo, que no ha hecho más que crecer desde la década de los 80 y que en los comicios legislativos de 2008 superó el 52 %.

"Azores es la región con menor cualificación escolar de todo el país, y cuanto mayor es el nivel de estudios, más participación política hay. En el archipiélago todavía persisten algunas zonas localizadas con personas desfavorecidas, que viven en la pobreza, y a ellas unas elecciones no les interesan tanto", razonó Borralho.

En los últimos días de campaña, el socialista Vasco Cordeiro repitió de forma insistente que es preciso "ir a votar", temeroso de que algunos de sus votantes no acudan a las urnas por un exceso de confianza.

La socialdemócrata Berta Cabral, por su parte, procuró distanciarse de su partido a nivel nacional, que gobierna desde hace un año y cuatro meses en Portugal y ha aplicado a rajatabla un draconiano programa de ajustes y reformas acordado con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional a cambio de su rescate.

De hecho, a finales de esta semana el Ejecutivo de Lisboa hizo pública su propuesta de Presupuestos Generales para 2013, que recoge un significativo aumento de impuestos muy contestado por la oposición y los sindicatos.

"Quiero dejar claro que no concuerdo con esos presupuestos preliminares, que me desmarco y que creo que no deben ser aprobados", dijo ayer mismo Cabral en uno de sus últimos actos de campaña, en la que no participó el primer ministro luso y a su vez líder del PSD, Pedro Passos Coelho.

Los ciudadanos de las islas de San Miguel, Santa María, Tercera, Graciosa, San Jorge, Faial, Pico, Flores y Corvo elegirán mañana a un total de 57 diputados en unos comicios a los que se presenta una docena de fuerzas políticas.