Escenario de economía de guerra activado. El Gobierno ha iniciado contactos con diferentes industrias nacionales para la fabricación urgente de material sanitario 'made in Spain' para intentar contener la crisis del coronavirus. Estamos ante la peor situación desde la Guerra Civil, ha dicho Pedro Sánchez. Por eso el Ejecutivo va a tener que recurrir a diferentes factorías nacionales para recibir mascarillas, equipos de protección y todo tipo de materiales sanitarios. "Hay en parte algo de economía de guerra cuando parte de las empresas han derivado su producción para combatir el virus", ha asegurado.
Pedro Sánchez ha comparecido en 'prime time' ante los españoles para intentar erigirse en 'hombre de Estado', pero no ha anunciado nuevas medidas restrictivas para frenar el coronavirus con un país en 'shock'. El Gobierno no toma más medidas porque ya ha aprobado las restricciones más potentes de Europa, ha argumentado. Ha sido una declaración del presidente del Gobierno de una hora, justo cuando se cumple una semana desde la aprobación del estado de alarma. Mientras tanto el incremento de positivos se sigue disparando: España ya está al borde de los 25.000 infectados y hay más de 1.300 fallecidos.
El presidente del Gobierno ha avisado de que "van a llegar días muy duros" y ha afirmado que los casos positivos se van a seguir incrementándose durante la próxima semana. La situación es especialmente grave en lugares como Madrid, ha destacado el jefe del Ejecutivo. "Haremos lo que haga falta, cuando haga falta y donde haga falta", ha insistido en un discurso que ha recibido duras críticas por la ausencia de contenido y medidas concretas.
🔴 @sanchezcastejon Estamos en un momento crítico y van a llegar días muy duros.
— PSOE (@PSOE) March 21, 2020
Debemos llegar al final de la semana que viene MUY FUERTES y seguir estrictamente las medidas para evitar el contagio.#EsteVirusLoParamosUnidos pic.twitter.com/bzIsHy6deE
Sánchez también ha destacado que Europa se encuentra probablemente ante la peor situación desde la II Guerra Mundial. Y respecto a España ha aludido a lo ya mencionado: es la situación más desfavorable desde la Guerra Civil. Ha pedido encarecidamente a los ciudadanos que se unan para formar parte de la línea de batalla contra el coronavirus, unas palabras que recuerdas a las del Jemad, general Villarroya. "Cuanto todo pase sabremos si fuimos generosos y valientes", ha recalcado. Ha reclamado "unidad" a todos.
El jefe del Ejecutivo ha afirmado que ya se ha materializado la compra y la puesta en marcha de los test de detección rápidos. Se trata de test fiables y homologados. "Entregaremos un millón y la misma cantidad de mascarillas", ha insistido. También ha activado, como decimos, la construcción de material fabricado en España, un trabajo a contrarreloj para suministrar esos materiales sanitarios a los hospitales. Y ha desvelado que el Gobierno está cerrando una operación para poder importar 6 millones de test.
"Estamos en un momento crítico y van a llegar días muy duros para los que nos vamos a tener que preparar desde el punto de vista psicológico y emocional. Es necesario llegar muy fuertes a finales de la semana que viene", ha destacado durante una comparecencia desde Moncloa.
Sánchez ha afirmado que estos siete días nos han cambiado a todos los ciudadanos y ha querido también trasladar su "profundo pesar" a las familias que han perdido a un ser querido. También ha cambiado, ha dicho, la percepción de los españoles por los servidores públicos, por quienes nos atiende en la tienda, por nuestros vecinos... Ha sido un discurso emocionante por partes, especialmente en el inicio.
El objetivo del Gobierno es detener el virus y frenar una "propagación tan rápida" del mismo, ha destacado, por eso ha tomado decisiones tan excepcionales que afectan a la vida diaria de los españoles. "Ganar tiempo para preparar nuestro sistema sanitario mejor", ha dicho, de acuerdo con el dictado de los expertos y con la OMS. Se trata de un equilibrio entre eficacia sanitaria, medidas económicas y de confinamiento.
El coronavirus, ha afirmado, tiene mayor propagación y letalidad que la gripe. Ha destacado que hay que seguir prestando atención a personas mayores y ciudadanos con patologías previas. Y ha añadido que si otros países no toman medidas de este tipo, en clara referencia a Reino Unido, están siendo una excepción.
Sánchez también ha arremetido contra los dirigentes autonómicos que han criticado al Gobierno central. "El deber es mantener la unidad; nadie de mi Gobierno va a polemizar contra ninguna otra administración", ha destacado. "Lo importante es que todos los españoles continúen haciendo durante esta semana lo pedido y que todas las administraciones estemos a una y, estamos a una”, ha añadido. Era una clara alusión a Quim Torra. La presienta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, le respondió inmediatamente:
Sánchez no ha dicho ni propuesto absolutamente nada que no se esté haciendo en Madrid. Así que no acepto que la señale como la apestada en su mitin televisivo.
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) March 21, 2020
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios