EE.UU. condena cadena de atentados que causó al menos 42 muertos en Irak

Washington, 20 mar.- El Gobierno de EE.UU. condenó la cadena de atentados terroristas que causó hoy al menos 42 muertos en Irak, en coincidencia con el noveno aniversario de la invasión de ese país, y denunció que son un intento de grupos "extremistas" para socavar el progreso de la nación árabe.

"Condenamos enérgicamente los ataques contra civiles inocentes en Irak", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en su rueda de prensa diaria.

El Gobierno del presidente Barack Obama atribuye estos atentados a grupos "extremistas" que pretenden "socavar el progreso de Irak hacia un futuro más seguro, estable y próspero", indicó Carney.

La cadena de atentados terroristas, que causó al menos 42 muertos, se produce sólo una semana antes de la celebración de la Cumbre de jefes de Estado árabes en Bagdad.

Fuentes policiales en Irak informaron a Efe que la mayoría de los atentados, que sacudieron sobre todo la capital, Bagdad, y las ciudades de Kirkuk (norte), Kerbala (sur) y Ramadi (oeste), fueron perpetrados con coches bomba, varios de ellos perpetrados por terroristas suicidas.

Según el portavoz de la Casa Blanca, los ataques "están claramente dirigidos a tratar de llamar la atención" en los días previos a la mencionada cumbre en Bagdad.

A pesar de los extremistas, "la violencia en Irak se mantiene en mínimos casi históricos" y las fuerzas iraquíes "han mostrado su capacidad para hacer frente a los desafíos de seguridad que existen en el país", anotó Carney.

La cadena de atentados de hoy se ha producido nueve años después del inicio, el 20 de marzo de 2003, de la invasión a Irak por parte de una coalición multinacional encabezada por EE.UU. y que terminó con la caída del régimen del mandatario Sadam Husein.

Irak vive un repunte de la violencia desde la retirada de los soldados estadounidenses, el 18 de diciembre pasado, y la emisión, un día después, de una orden de arresto contra el vicepresidente del país, el suní Tareq al Hashemi, por supuestos delitos de terrorismo.

Esa orden de detención ha desencadenado una profunda crisis política, agravada por los numerosos atentados perpetrados contra objetivos chiíes y contra los cuerpos de seguridad.