El alcalde de Bruselas dice que la amenaza terrorista es "concreta" y "real"

Bruselas, 25 sep.- El alcalde de Bruselas, Yvan Mayeur, afirmó hoy que la amenaza terrorista de integristas islámicos en la ciudad es "concreta" y "real", y señaló la necesidad de "estar vigilantes" y protegerse ante los potenciales riesgos.

"La amenaza no es virtual, es concreta, es real", indicó el alcalde en un programa de la emisora RTL, en la que consideró que Bruselas debe "esperar seguir siendo un objetivo".

Mayeur se pronunció así un día después de que el Gobierno federal decidiese sumarse a la coalición de países que Estados Unidos lidera contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en Irak con la aportación de seis aviones de combate F-16 que operarán desde Jordania, contribución que aún debe ser aprobada por el Parlamento.

"Ya hemos tenido un atentado grave en el Museo Judío de Bruselas", recordó el regidor en referencia al ataque en el que el pasado 24 de mayo fueron asesinadas cuatro personas, a la vez que pidió "no caer en la paranoia pero permanecer vigilantes".

Mayeur incidió en que las autoridades han tomado medidas para "luchar contra la radicalización", como la puesta en marcha de una célula para vigilar a los belgas sospechosos de apoyar la yihad.

"Se están examinando catorce dossieres", apuntó.

La última actuación policial en este sentido tuvo lugar la pasada noche, cuando un ciudadano sirio de 24 años fue detenido en el aeropuerto de Charleroi, al sur de Bruselas, por pertenecer presuntamente a un grupo terrorista, según informa hoy el diario "Le Soir".

El individuo, que procedía de Grecia y tenía previsto volar a un país escandinavo, estaba en posesión de pasaportes falsos y de documentos "sospechosos relativos a la situación en Siria".

Se trata del segundo supuesto yihadista detenido en ese aeropuerto en un mes y medio, recuerda ese medio.

A mediados de agosto, otro joven sirio fue arrestado en condiciones similares, ya que también procedía de Grecia y se dirigía a Escandinavia y poseía documentación falsa y una llave USB que contenía vídeos de asesinatos perpetrados en su país de origen.