El congreso convalida la reforma de la negociación colectiva, con los únicos votos del psoe

El Pleno del Congreso de los Diputados convalidó este miércoles, con el único apoyo de los parlamentarios socialistas, el real decreto ley de reforma de la negociación colectiva aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 10 de junio.
El Congreso respaldó la reforma con 169 votos a favor, 159 en contra y 20 abstenciones. El PSOE se quedó sólo para sacar adelante su propuesta sobre los convenios. El PP, IU-ICV, ERC, BNG y UpyD votaron en contra, mientras que PNV, CiU, Coalición Canaria y UPN se abstuvieron.
Además, se decidió por 346 votos a favor que la tramitación de la reforma de los convenios como proyecto de ley.
El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, defendió ante el Pleno la reforma, y destacó que los "cuatro rasgos fundamentales" que configuran el carácter de esta propuesta son la "profundidad, eficacia, equilibrio y respeto".
Además, se mostró confiado en que su aplicación refuerce "la confianza externa en nuestra economía".
Los distintos grupos parlamentarios coincidieron en que era necesaria una reforma de la negociación colectiva, pero no la que presentaba el Gobierno. Además, lamentaron que no haya habido acuerdo entre los agentes sociales y que no servirá para crear empleo.
El portavoz del PSOE en el debate, Jesús Membrado, subrayó que "el consenso se ha quedado a las puertas del Congreso", y afirmó que han sido los "intereses políticos de algunos empresarios" las causas de la falta de acuerdo entre patronal y sindicatos.
REFORMA "SUPERFICIAL"
Desde las filas del PP, la diputada Fátima Báñez subrayó que "hoy, más que nunca, se siente la debilidad de un Gobierno sin apoyos claros en esta Cámara", algo que consideró no puede prolongarse por más tiempo.
La propuesta de los convenios del Gobierno es "para salir del paso y cumplir el calendario de Bruselas; es una reforma superficial y que tendrán que ser en un futuro reforma para reformar", agregó.
Por su parte, el diputado de CiU Carles Campuzano explicó que su grupo apuesta por un modelo que "no nos condene" a un paro estructural como el que tiene España, o a que el despido sea la única salida a una situación de crisis. Por ello, dijo, "somos partidarios de una reforma a fondo" de la negociación colectiva.
El portavoz del PNV en el debate, Emilio Olabarría, señaló que algunos grupos "nos sentimos engañados", y añadió que la reforma "no va a posibilitar una mejora de la competitividad" de la economía española, ni va favorecer la creación de empleo.
El diputado de Coalición Canaria Fernando Ríos señaló que es necesaria una reforma, si bien indicó que "no vamos a votar en contra pero tampoco a favor, ello sucederá si a lo largo de la tramitación como proyecto de ley se logra un consenso mínimo entre los agentes sociales".
MÁS PODER EMPRESARIAL
El diputado de IU-ICV Gaspar Llamazares lamentó que se otorga "mayor poder" a los empresarios, y recordó que los sindicatos han denunciado que la reforma ataca los derechos de los trabajadores.
Por su parte, el diputado de ERC Joan Ridao denunció que el Gobierno "lo estropea absolutamente todo" cuando no hay acuerdo entre patronal y sindicato, para explicar que votan en contra porque "no compartimos para nada la prevalencia de los convenios de empresa", a pesar de reconocer que hay algunos avances.
Según la diputada del BNG Olaia Fernández, la reforma "desgraciadamente desembocará" en recortes socio laborales, por lo que votarán en contra de la misma.
Mientras, la diputada de UPyD, Rosa Díez, aseguró que éste es el "primer fracaso del Gobierno de la etapa post Zapatero", y agregó que "podía haber sido trascendental de haberse hecho bien" la reforma de los convenios.