El control del Senado se resiente por el debate catalán en el Congreso

  • El Senado celebrará esta tarde una sesión de control al Ejecutivo un tanto mermada al coincidir con el debate sobre Cataluña del Congreso de los Diputados, que concentrará la principal atención política y mediática y congregará dentro del hemiciclo a parlamentarios de ambas cámaras.

Madrid, 8 abr.- El Senado celebrará esta tarde una sesión de control al Ejecutivo un tanto mermada al coincidir con el debate sobre Cataluña del Congreso de los Diputados, que concentrará la principal atención política y mediática y congregará dentro del hemiciclo a parlamentarios de ambas cámaras.

De los trece senadores que componen el grupo de CiU sólo uno, Eva Parera, estará en la Cámara alta durante la sesión de control al Ejecutivo, pues el resto irán al Congreso para seguir en directo el debate sobre la petición del Parlamento catalán de traspasar a la Generalitat las competencias para convocar referendos.

Para poder asistir, los senadores catalanes han retirado previamente las preguntas que habían formulado al Ejecutivo, lo que, al mismo tiempo, permitirá también a algunos ministros acudir al Congreso por no ser necesaria su presencia en la Cámara alta.

En total, sólo siete de los trece ministros del gabinete de Mariano Rajoy responderán a las preguntas de los senadores.

A las bajas ya anunciadas la semana pasada del propio presidente, así como de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y de los ministros de Defensa, Pedro Morenés, y de Empleo, Fátima Bañez, se han sumado otras tres.

Según se ha conocido hoy, tampoco estarán en el Senado los ministros de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón; Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; e Interior, Jorge Fernández Díaz.

Los senadores de CiU consideran que, "como representantes de un territorio concreto", deben estar en el Congreso, según ha dicho hoy su portavoz, Josep Lluís Cleries, que espera que sea un debate "sereno" en el que Cataluña expresará que si hay voluntad política, la consulta soberanista se puede celebrar para que "Cataluña sepa, aunque sea sin carácter vinculante, la opinión de los catalanes sobre qué futuro queremos".

"Cataluña debe dibujarse un futuro", ha dicho Cleries, quien ha añadido que no puede continuar en las condiciones actuales, porque está "agotada", y ha precisado que no se trata de "la obsesión de una persona, es la obsesión de un pueblo que queremos un futuro diferente".

La propuesta catalana contará con toda probabilidad con el rechazo del Congreso, a lo que el senador de CiU responde: "Igual que en la Semana Santa se han de hacer todos los pasos del vía crucis, nosotros también pasaremos este paso, pero sabiendo que después llega Pascua" y que "Cataluña votará el 9 de noviembre".

A diferencia de los senadores de CiU, la mayoría de los de la Entesa pel Progrés de Catalunya, que aglutina a PSC e ICV, estarán en la sesión de control del Senado.

No obstante, el senador socialista y expresidente catalán, José Montilla, espera que el debate se desarrolle con "corrección" y que se aproveche por parte del Gobierno para "no hacer sólo de pared" y dar soluciones a un problema que "es real y que existe".

Montilla ha recalcado que se conoce la propuesta del Parlamento de Cataluña, pero no la respuesta del Gobierno más allá de su rechazo.

"El diálogo siempre estará abierto", ha señalado el portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro, quien ha insistido en que la propuesta catalana está al margen de la Constitución y ha recordado que ni el Congreso ni el Senado tiene capacidad para decidir lo contrario.

Para el secretario general del grupo socialista, José Miguel Camacho, hoy debe quedar "muy claro" que España necesita una reforma constitucional para que todas las comunidades autónomas se sientan cómodas dentro de la Carta Magna.

Mostrar comentarios