Madrid.- La "prisión perpetua revisable" que el PP propone incluir en la reforma del Código Penal será una pena específica para los delitos más graves, como asesinatos terroristas y muertes con agresión sexual, que se revisará a partir de los 20 años si el condenado cumple ciertos requisitos, entre ellos el arrepentimiento.
Así se especifica en una de las más de 90 enmiendas parciales que los 'populares' presentarán mañana al proyecto de Ley Orgánica de modificación del Código Penal, remitido por el Gobierno al Congreso.
Según ha explicado en un encuentro con la prensa el portavoz de Justicia del PP, Federico Trillo, la "prisión perpetua revisable" se cumplirá por un periodo inicial de 20 años, antes de los cuales el condenado no podrá obtener la libertad condicional, fórmula que contemplan las legislaciones de numerosos países europeos.
Tras ese periodo, el tribunal sentenciador podrá revisar la condena si constata un pronóstico favorable de reinserción en el condenado, si existe arrepentimiento y ha satisfecho sus responsabilidades civiles, y si "la gravedad de la culpa no exige el cumplimiento efectivo de la pena", en cuyo caso la pena puede convertirse en una cadena perpetua real.
En otra de las enmiendas, el Partido Popular introduce algunos cambios en la "libertad vigilada" que recoge el texto del Ejecutivo para delincuentes peligrosos y reincidentes una vez que han cumplido la pena.
En este punto, el PP considera que, durante el periodo de libertad vigilada de hasta 10 años que imponga la autoridad judicial, se debe exigir la utilización de medios electrónicos para localizar permanentemente al reo, debe existir un responsable del cumplimiento de las medidas de control y, además, pide que se prohíba al condenado hacer declaraciones a los medios de comunicación si suponen algún beneficio económico.
Otra de las novedades que proponen los populares es que se amplíe la imprescriptibilidad de los delitos de terrorismo y se aplique, no sólo si hay víctimas mortales, como contempla el texto del Ejecutivo, sino también a casos de lesiones graves o de secuestro.
También piden que se amplíen los delitos en los que se exige el cumplimiento efectivo de la condena, además del terrorismo y los cometidos por bandas organizadas -ya previstos en el proyecto-, a los de asesinato, detención ilegal y secuestro, agresiones y abusos sexuales a menores de 13 años, y delitos de robo con violencia o intimidación en casa habitada.
El PP quiere reforzar también las agravantes de reincidencia y reiteración, regular como una nueva agravante la utilización de menores de edad para cometer delitos e incluir como nueva figura delictiva la captación de menores de edad a través de Internet.
Además pide agravar la pena específica de los robos en locales abiertos al público, aún fuera del horario comercial, para que puedan ser castigados con penas de 4 a 7 años, y los robos en casas habitadas -de 5 a 8 años-.
Trillo ha explicado que con estas propuestas pretenden mejorar la reforma del Gobierno, que a su juicio es insuficiente, aunque ha reconocido que cumple parte de los compromisos asumidos por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero en el pacto por la Justicia que alcanzó con el líder de la oposición, Mariano Rajoy.
Por esa razón, el PP no presentará una enmienda a la totalidad al proyecto, como sí han hecho el PNV, ERC-IU-ICV y el BNG, aunque pretende que el Ejecutivo acepte muchas de las propuestas que presentará mañana, cuando concluye el plazo para ello, en forma de enmiendas parciales al proyecto.
El próximo jueves el pleno del Congreso debatirá las enmiendas de devolución presentadas a la reforma por los grupos de izquierda y los nacionalistas, y durante el debate, el PP explicará también algunas de sus propuestas.
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