El PSOE acusa a Sanidad de inventarse una polémica de la píldora postcoital

Madrid, 5 jun.- El grupo socialista del Senado ha acusado hoy al Ministerio de Sanidad de "inventarse" una polémica sobre la píldora del día después y ha calificado de "escándalo" que haya "hurtado" a la sociedad los informes científicos respecto a los efectos de este fármaco en la salud de las mujeres.

Así lo ha manifestado hoy el portavoz socialista en la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales de la Cámara Alta, Roberto Lertxundi, quien ha considerado que no tiene fundamento que la ministra de Sanidad, Ana Mato, haya encargado un nuevo informe antes de tomar una decisión sobre la libre dispensación de la píldora postcoital.

Mato ha pedido un nuevo informe al Consejo Asesor de Sanidad después de que los tres solicitados anteriormente a la Sociedad Española de Ginecología, a la Organización Médica Colegial y a la Agencia Española del Medicamento fueran diversos entre sí.

Para el senador socialista, pedir otro informe no hace sino alargar la situación y carece de fundamento.

"Da la impresión de que estamos en manos de gente poco competente", ha señalado Lertxundi, quien ha pedido al Ministerio una solución definitiva.

El parlamentario ha puesto de relieve las dificultades de su grupo para conseguir los informes y ha explicado que el único de los tres que se muestra en contra de la dispensación sin receta de la píldora es el de la OMC, al que ha restado importancia, al considerar que no se trata de una organización científica sino gremial.

En su informe, esta entidad concluye que los medicamentos deben estar controlados por los médicos, ha señalado Lertxundi, quien ha recordado que en España existen "centenares" de fármacos que no están sujetos a prescripción facultativa.

El senador ha asegurado que el Sistema Español de Farmacovigilancia no ha detectado hasta la fecha "ninguna reacción adversa grave" en el uso de la píldora del día después y ha precisado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo considera un medicamento esencial.

A su juicio, los informes se deben sustentar en su condición de medicamento de urgencia, ya que cuanto antes se utiliza su eficacia es mayor.

Lertxundi ha explicado que la libre dispensación de este fármaco está autorizada en más de 60 países del mundo y en todos los europeos, salvo en siete, y ha incidido en ofrecer garantías a las usuarias "para que no tengan ningún tipo de miedo" respecto a su seguridad.

En cuanto a su uso por parte de adolescentes, el senador ha precisado que desde la aprobación en 2002 de la Ley de Autonomía del Paciente, la mayoría sanitaria se sitúa en los 16 años.

A raíz de esa normativa, según el portavoz, una chica de esa edad puede donar sus órganos y puede someterse a intervenciones de cirugía plástica sin la autorización de sus padres.

Además, las adolescentes pueden tener relaciones sexuales libremente consentidas a partir de los 13 años.

"A qué viene plantearnos esas pegas infundadas?", se ha preguntado.