Eta. El pp entiende que el chivatazo y el "bildunazo" forman parte de "una misma secuencia"

El diputado del PP Ignacio Gil Lázaro afirmó hoy que el chivatazo a ETA investigado en el llamado "caso Faisán" y lo que denominó como "el bildunazo", en alusión a la concurrencia de Bildu a las elecciones, forman parte de "una misma secuencia".
Esta interpretación fue la única novedad del intercambio dialéctico entre Gil Lázaro y el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al retomar el primero el chivatazo en la sesión de control de hoy, esta vez inquiriendo sobre la negativa de la Audiencia Nacional a cambiar el equipo policial que investigó el caso, como solicitó uno de los imputados.
Rubalcaba contestó inicialmente que él no opina sobre las decisiones de jueces, fiscales y abogados, que es lo que fueron tanto el nombramiento del equipo policial como su impugnación.
En su réplica, Gil Lázaro insistió en advertencias de otros días como que el chivatazo no le "va a salir gratis" a Rubalcaba y que éste tiene una deuda con las víctimas, la policía y la dignidad colectiva, que, vaticinó, los ciudadanos le harán pagar en las urnas y "quizá" más tarde lo haga un tribunal.
Reiteró también que el vicepresidente ha tratado de impedir la acción de la justicia y que ha mentido reiteradamente al Parlamento y a la opinión pública porque el chivatazo "no pudo hacerse a sus espaldas", pues "tuvo un móvil político enmarcado en el proceso de negociación".
"Su prepotencia le ha delatado", espetó a su interlocutor, a quien acusó de tapar con "gracietas" lo "mucho que ocultar" que tiene en relación con el "caso Faisán" y definió como "una víctima de sí mismo".
Finalmente, dijo que "del chivatazo al bildunazo hay una misma secuencia", en la que Rubalcaba habría venido "manejando y pisoteando la ley", y concluyó: "Usted se va pero el 'caso Faisán' permanece, como pórtico de su derrota y su vergüenza".
El vicepresidente contraatacó pidiendo a Gil Lázaro que no utilice a las víctimas del terrorismo para sus intereses particulares, pues "son de todos", y se mofó de que, después de varias semanas sin preguntar el "caso Faisán" en la sesión de control, el diputado popular no trajera "algo más imaginativo". Recalcó que el equipo investigador lo nombró un juez y que hasta ahora el único que le criticó fue el PP, "hasta que le ha venido bien hacer lo contrario".