Eta. Una alcaldesa de bildu incluye en las fiestas un “desfile” en favor de los presos de eta

Saioa Villanueva, alcaldesa de Bildu en Sopelana (Vizcaya), ha autorizado que en las fiestas locales de este municipio, que empezaron este jueves, se lleve a cabo una “kalejira” o desfile para pedir la amnistía de los presos de ETA.
El desfile está programado para la noche de este sábado, en concreto a las 00,00 horas. La “kalejira” la llevará a cabo el grupo Sopelako Herri Bilguneak.
En este sentido, Teresa Fernández, portavoz del PSE en Ayuntamiento de Sopelana, informó a Servimedia de que su partido, PNV y PP apoyaron este miércoles una moción que rechaza este desfile en favor de los presos etarras. La moción había sido presentada por los peneuvistas.
En el texto presentado por la formación nacionalista, se critica “enérgicamente” que se haga de las fiestas locales de Sopelana una “utilización política”, al autorizar una “kalejira” o desfile que pide la amnistía de los presos etarras.
Los peneuvistas sostienen que este desfile se incluye este año en las fiestas con la llegada de Bildu al poder. La formación de Íñigo Urkullu asegura que las fiestas de Sopelana “son de todos y para todos y nunca se han politizado y nunca se deben politizar”.
“REPULSA”
Además, esta formación nacionalista destaca el hecho de que el desfile en favor de los presos etarras sólo se incluye en los programas de fiestas que están en euskera, pero no los que están en castellano. El PNV sostiene que esto es para que “sólo los euskaldunes tengan constancia de la utilización política”.
Por este motivo, la formación de Íñigo Urkullu expresa su “repulsa” porque la alcaldesa de Bildu haya autorizado este desfile, que los peneuvistas consideran un “hecho lamentable” que no debería volver a ocurrir.
Por otra parte, la portavoz del PSE en Sopelana, Teresa Fernández, anunció que no acudirá a los actos de las fiestas locales, después de que la alcaldesa de Bildu impidiese este miércoles que se debatiese una moción socialista. La iniciativa instaba a prohibir que en la fachada del Ayuntamiento se colgase ningún cartel a favor de los presos etarras, como ocurrió el año pasado.