"De todo corazón, gracias Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) por su solidaridad con Colombia", dijo el grupo armado en un comunicado leído en La Habana por Iván Márquez, jefe del equipo negociador de las FARC.
Durante una cumbre realizada en Quito la semana pasada, esa organización de países acogió el pedido de la guerrilla y del gobierno de Colombia para que forme parte, bajo supervisión de la ONU, de la comisión que verificará el fin del enfrentamiento armado de más de medio siglo en Colombia.
La comisión, que también estará conformada por delegados de ambas partes, entrará a funcionar una vez se firme el acuerdo con el que Colombia aspira a terminar con el conflicto interno, que deja unos 220.000 muertos y millones de desplazados, y en el que también han participado grupos contrainsurgentes clandestinos.
"Al aceptar este servicio altruista y de humanidad que busca propiciar el fin de una prolongada guerra" la Celac "reafirma los propósitos acordados en la Proclama de América Latina y el Caribe como zona de paz", destacó Márquez.
El gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) reanudaron este martes los diálogos en La Habana, iniciados en 2012, tras una pausa de varios días.
Las partes negocian una agenda de seis puntos, cuatro de los cuales ya están prácticamente acordados. Quedan por definir el fin del conflicto, que incluye el desarme de las FARC, y el mecanismo de refrendación de los pactos.
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