Asunción, 16 oct.- La Fiscalía paraguaya solicitó a un juez que ordene la expulsión del país de un activista estudiantil chileno detenido el lunes en Asunción tras participar en una protesta y que ahora cumple arresto domiciliario en el consulado de su país, informaron fuentes judiciales.
"Hemos pedido la expulsión. Está en manos del juez", dijo a Efe el fiscal encargado del caso, Christian Bernal.
El cónsul de Chile en Asunción, Felipe Artal, dijo que la defensa del activista chileno, llamado Patricio Javier Flores, de 26 años, también pedirá su expulsión del país.
Flores, militante del Partido Comunista chileno, fue imputado por "perturbación de la paz pública" por participar en una protesta junto con integrantes de la Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (Fenaes) de Paraguay, que entraron en el Ministerio de Educación el pasado 2 de octubre para reclamar un mayor presupuesto para ese área.
"Participó en un hecho de violencia aquí", dijo Bernal, quien pidió la orden de detención, mientras que el Servicio Paz y Justicia, una organización de derechos humanos paraguaya, y la Fenaes mantienen que la manifestación fue pacífica.
El juez de Garantías Rubén Ayala Brun deberá decidir en los próximos días si ordena la expulsión de Flores y si le prohíbe regresar por algún período de tiempo, explicó Bernal.
En cambio, el cónsul dijo que si Flores es expulsado la causa quedará "extinta" y podría volver a Paraguay si así lo deseara.
"El agravante es su calidad de turista", dijo el fiscal, que destacó que como tal no debería participar en la "toma" de una institución pública paraguaya, como el Ministerio de Educación.
Flores dijo el martes a Efe que en el momento de su detención pensó que sufría un secuestro porque tres personas vestidas de civil lo asaltaron en el centro de Asunción a punta de pistola sin identificarse y lo metieron en un vehículo sin logo.
Tras identificarle con base en fotografías de una decena de dirigentes de la Fenaes de Paraguay, los hombres le dijeron que eran policías, explicó.
La comisaria Elisa Ledesma, portavoz de la Policía, dijo hoy a Efe que los agentes que lo arrestaron pertenecen a la Unidad de Investigación de Delitos, que no usa un uniforme policial tradicional, sino solo camisetas con la identificación de ese cuerpo.
El Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP), una entidad estatal paraguaya, dijo que los policías "vestían indumentaria civil, no enseñaron identificación ni informaron a la persona el motivo de la detención ni los derechos que le amparaban".
Flores también aseveró que los agentes le sometieron a un interrogatorio sobre la Fenaes y sus vínculos con partidos de izquierda sin la presencia de un abogado, ni le permitieron llamar a nadie.
Tanto la policía como la fiscalía niegan cualquier violación de sus derechos. Ledesma dijo que todo ocurrió "según el procedimiento", mientras que Bernal afirmó que las alegaciones de Flores "son todo mentiras".
El MNP ha anunciado que pedirá la apertura de un sumario administrativo sobre el caso, una vez que reciba una copia del acta de intervención de la Policía.
Flores estuvo detenido en una comisaría de Asunción hasta el miércoles, cuando Ayala Brun decretó el arresto domiciliario, que cumple en el consulado de su país.
Durante el tiempo que permanezca en la sede tiene prohibido comunicarse con la Fenaes, que representa a unos 40.000 jóvenes de todo el país.
El Frente Guasú, la formación política a la que pertenece el expresidente paraguayo Fernando Lugo, ha calificado la detención como "arbitraria e ilegal" y denunció una "acción represiva del Gobierno contra los estudiantes".
Ese partido, de izquierda, indicó que la policía interrogó y amedrentó al chileno con acusaciones de terrorista, comunista, chavista y bolivariano.
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