"Indignados" piden reabrir la causa por su detención en Ciutat de la Justicia

Barcelona, 7 jul.- Los "indignados" que fueron arrestados en la Ciutat de la Justicia por el bloqueo del Parlament en 2011 pedirán que se reabra la investigación sobre la irrupción de los Mossos en el edificio judicial, después de que la Audiencia Nacional reconozca que las detenciones "carecían de cobertura legal".

En declaraciones a Efe, Jaume Asens, abogado de varios de los "indignados" absueltos por la Audiencia Nacional, ha afirmado que a raíz de la sentencia se deben "depurar responsabilidades", por lo que solicitará que se reabra la querella que en su día presentó por la detención de seis jóvenes que esperaban en la cafetería de la Ciutat de la Justicia tras entregarse al juez de guardia.

Un juez de Barcelona abrió diligencias por un delito de detención ilegal para aclarar los hechos, que motivaron la protesta de la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), pero la archivó poco después al entender que los arrestos habían sido asumidos por el juez de la Audiencia Nacional que investigaba los actos de acoso a diputados del Parlament.

En su sentencia, en la que absuelve a 19 de los 20 "indignados" acusados, la Audiencia Nacional mantiene que, al margen de si la detención fue ordenada verbalmente por el juez o respondió a "una iniciativa privada de la policía", la medida "carecía de cobertura legal, ya que se adoptó sin identificar un fin que legitimara constitucionalmente la privación de libertad".

En opinión de la Audiencia Nacional, la detención de los seis encausados en la Ciutat de la Justicia, en una operación en la que fueron retenidos por la policía abogados de los procesados y periodistas que cubrían la información "fue una decisión que pudo vulnerar el derecho a la libertad del artículo 17.1 de la Constitución".

En opinión de Jaume Asens, la sentencia de la Audiencia Nacional sienta un "valioso precedente" en el amparo del derecho a la protesta y pone de relieve que los que "traspasaron las líneas rojas" no fueron los "indignados" sino los Mossos d'Esquadra.

Según el abogado, pese a que se buscaba un "castigo ejemplar" para los "indignados, la sentencia ha acabado por dar un varapalo al dispositivo policial que se montó en los alrededores del Parlament, por no haber permitido "compatibilizar el derecho a la protesta de los manifestantes con el de los diputados a entrar en la cámara".