La Justicia portuguesa, a punto de acabar el juicio por los explosivos de ETA

  • La Justicia lusa decide este viernes si da por concluido el juicio por el arsenal de la organización terrorista ETA encontrado el año pasado en Portugal o lo alarga con la convocatoria de una docena más de testigos.

Caldas da Rainha (Portugal), 5 ene.- La Justicia lusa decide este viernes si da por concluido el juicio por el arsenal de la organización terrorista ETA encontrado el año pasado en Portugal o lo alarga con la convocatoria de una docena más de testigos.

Fuentes del tribunal de Caldas da Rainha, que lleva el caso, informaron a Efe de que los jueces responderán en esta sesión, la octava desde que arrancó el proceso el 13 de septiembre, a la última petición de testimonios formulada por la defensa del acusado, el supuesto etarra Andoni Zengotitabengoa.

En caso de rechazar esa solicitud, los magistrados pueden dar por concluido el proceso e incluso leer, en la misma sesión, la sentencia al imputado, sobre el que pesan varias acusaciones de delitos relacionados con el terrorismo, con penas de hasta quince años de cárcel.

Zengotitabengoa está acusado de montar, en una casa de la localidad de Obidos, cercana a Caldas da Rainha y a unos cien kilómetros al norte de Lisboa, un almacén con casi 1.500 kilogramos de explosivos destinados a cometer atentados en España.

Este supuesto etarra es el primero que ha sido juzgado en Portugal por delitos graves cometidos en este país, entre ellos robo, falsificación y apoyo a una organización terrorista.

La Fiscalía le acusa de guardar y preparar, junto a otro supuesto etarra detenido en Francia, Oier Gómez Mielgo, una cantidad de explosivos suficiente para volar una manzana de casas.

En la anterior sesión del juicio, el 12 de diciembre, se esperaba ya la lectura de la sentencia, pero el tribunal decidió alargar el proceso ante los nuevos cargos que habían formulado los fiscales en sus alegaciones finales.

La acusación sustituyó el cargo inicial de tenencia de armas prohibidas para la práctica de terrorismo por el más grave de asociación y apoyo a una organización terrorista, un delito tipificado en Portugal tras los atentados de Nueva York del 11 de septiembre de 2001.

El tribunal de Caldas da Rainha aceptó el cambio, que consideró "no relevante", pero dio nuevos plazos de alegaciones y respuesta a la defensa y la Fiscalía, que serán resueltos en esta vista.

El abogado José Galamba descartó pedir una repetición del juicio por las alteraciones de cargos, pero ha solicitado la comparecencia de una docena más de testigos.

Zengotitabengoa permanece en prisión preventiva desde marzo de 2010, cuando fue detenido en el aeropuerto de Lisboa con un billete con destino a Caracas.

Según las autoridades lusas, pretendía huir de Portugal un mes después de abandonar precipitadamente la casa donde se encontraron los explosivos.

El almacén, considerado por los fiscales una base logística de apoyo a los atentados de ETA, fue descubierto el 4 de febrero, después de que Zengotitabengoa y Gómez Mielgo lo abandonaran precipitadamente tras saltarse un control de tráfico portugués.

La pareja formaba parte de un comando de ETA desplazado a este país hacia finales de 2008.

La Policía lusa había detectado actividades de la organización terrorista en 2007, cuando se identificaron vehículos alquilados en este país para atentados y transporte de explosivos en España.

En enero de 2010 fueron detenidos en suelo luso, tras huir de un control policial en España, otros dos supuestos etarras, Garikoitz García Arrieta e Iratxe Yañez Ortiz de Barrón, entregados ya a la Justicia española, que trasladaban hacia Portugal una furgoneta con artefactos para fabricar explosivos.

En el juicio contra Zengotitabengoa, vecinos, comerciantes y empleados le identificaron a él y a Gómez Mielgo como los inquilinos de la vivienda de Obidos, mientras varios peritos constataron la potencia mortífera de las sustancias que almacenaba.

Por su parte, la defensa basó su estrategia en denunciar irregularidades y defectos en la investigación -como la presencia en la casa de Obidos de policías sin mandato judicial- para intentar invalidar los explosivos como prueba.

Galamba ha explicado hoy a Efe que entre los nuevos testigos cuya presencia que solicita están varios responsables policiales, y ha manifestado su rechazo a los cambios de último momento en la acusación realizados por la Fiscalía.

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