La OCDE respalda los avances de Portugal pero modera su optimismo

Lisboa, 27 oct.- La batería de reformas aprobada en Portugal durante los últimos años dieron fruto y hoy el país está en el camino correcto, según el criterio de la OCDE que moderó, no obstante, las optimistas previsiones del Ejecutivo luso.

El "Estudio Económico de Portugal 2014" elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y publicado hoy evalúa positivamente el "impulso reformador" de Lisboa, y considera que debe mantenerse para garantizar que el país resuelva sus problemas estructurales.

"Portugal avanzó con reformas que le han convertido en uno de los reformadores por excelencia dentro de la OCDE (...) Aunque ya están dando resultado, sus ventajas continuarán haciéndose sentir en el futuro", aseguró su secretario general, el mexicano Ángel Gurría, en Lisboa.

Sin embargo, Gurría insistió en los riesgos que todavía afronta el país, y subrayó que "a pesar de los progresos, la recuperación de Portugal es un trabajo todavía en curso", ya que precisa de un "crecimiento más robusto".

Precisamente, uno de los puntos más destacados de su informe son sus previsiones económicas, que difieren en varias áreas de las estimaciones avanzadas por Lisboa.

La OCDE apunta a una subida del PIB del 0,8 % este año y del 1,3 % en 2015, en ambos casos dos décimas por debajo de los cálculos del Ejecutivo nacional, y espera una reducción del déficit público dos décimas inferior a lo anunciado, hasta situarlo en el 2,9 %.

También divergen sobre el peso de la deuda pública -considerado uno de los principales problemas del país-, ya que el Gobierno apunta a una leve reducción para 2014 y 2015 que la dejaría en el 123,7 % del PIB, mientras que la OCDE cree que no dejará de crecer hasta el próximo año, cuando rondará el 128,3 %.

Preguntado por los periodistas sobre el motivo de esta disparidad de cifras, Ángel Gurría lo atribuyó a una "única diferencia fundamental, centrada en la evaluación del contexto externo".

El país confía en regresar este año al crecimiento después de tres años consecutivos de recesión (2011, 2012 y 2013), coincidiendo con la aplicación del severo programa de ajustes acordado con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de su rescate financiero, y que cerró con éxito el pasado mes de mayo.

El detallado estudio de la OCDE presta especial atención a los "elevados" niveles de desigualdad y pobreza lusos, que considera agravados por la crisis y se sitúan entre los más altos de toda Europa.

"Las reformas fiscales han aumentado la progresividad de los impuestos, pero las ayudas priorizan a los trabajadores de mayor edad, lo cual no es la herramienta más eficaz para reducir la desigualdad y la pobreza", se asegura en el documento, que también recuerda que los subsidios a las clases más desfavorecidas "son bajos" y la cobertura por desempleo es "reducida".