Los "Amigos de Siria" pide una solución política en cuestión de días

  • La segunda conferencia de los "Amigos de Siria" volvió a apostar hoy en Estambul por una solución negociada, aunque insistió en que ésta debe darse "en cuestión de días, no semanas".

Ilya U. Topper

Estambul, 1 abr.- La segunda conferencia de los "Amigos de Siria" volvió a apostar hoy en Estambul por una solución negociada, aunque insistió en que ésta debe darse "en cuestión de días, no semanas".

Los 83 países reunidos reconocieron, además, al Consejo Nacional Sirio (CNS), principal organización opositora en el exilio, como "un representante legítimo de todos los sirios".

"Los Amigos de Siria reconocen al CNS como representante de todos los sirios, como interlocutor principal para las negociaciones en Siria y organización paraguas para la oposición siria", manifestó el ministro turco de Asuntos Exteriores, Ahmet Davutoglu, en rueda de prensa al término de la conferencia.

Nada se avanzó, sin embargo, en medidas más agresivas contra el régimen de Bachar al Asad, como la intervención militar extranjera, el envío de una fuerza de paz árabe, o el apoyo explícito a la guerrilla siria, que demandan algunos sectores de la oposición y ciertos países de la región.

El documento final, de cuatro páginas, contiene, no obstante, numerosos detalles que respaldan la postura del CNS, como el expreso "apoyo a las medidas legítimas que tome la población siria para protegerse".

También recoge un llamamiento a los miembros de las fuerzas de seguridad sirias para que "no obedezcan órdenes ilegítimas", y una petición expresa para impedir el acceso del régimen al armamento.

Además, incluye el compromiso de los reunidos para "trabajar en medidas adicionales apropiadas que protejan a la población siria", frase ambigua que deja la puerta abierta a numerosas otras iniciativas.

Pese a que las conclusiones no permiten hablar de una nueva fase en la presión sobre el régimen, todos los participantes se esforzaron en presentar la reunión como un paso decisivo para poner fin a la violencia que ha segado ya la vida de más de 9.000 personas en un año.

La conferencia estableció, asimismo, dos grupos de trabajo: uno que se esforzará para ampliar las sanciones contra la dictadura de Al Asad y otro que trabajará para la recuperación económica de una futura Siria democrática.

Sin embargo, parece que cualquier medida quedará en suspenso al menos hasta el lunes, día en el que el enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan, presentará ante el Consejo de Seguridad un balance de su iniciativa de paz, aceptada en teoría por Al Asad, aunque no puesta en práctica, según se denunció este domingo.

"No quiero juzgar de antemano: primero quiero escuchar lo que diga Annan mañana, es un experimentado mediador", dijo la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, tras la conferencia.

Aún así, la jefe de la diplomacia norteamericana dio prácticamente por hecho que no habría cambios, ya que en su opinión "Al Asad ha decidido añadir este caso a su larga lista de promesas rotas".

Las conferencia de este domingo concluyó con un sólo paso llamativo: el reconocimiento del CNS como "un representante legítimo de todos los sirios".

Queda así reflejada como "la organización paraguas que aglutina a los grupos de oposición sirios" y se convierte en "el interlocutor principal de la oposición con la comunidad internacional", según señaló el propio Davutoglu.

El presidente del CNS, Burhan Ghaliun, un académico sirio exiliado en París, interpretó esta formulación como un respaldo rotundo.

"Esto significa que el régimen sirio ya no se considera legítimo a partir del día de hoy y que el pueblo sirio tiene derecho a derrocar este régimen ilegítimo", aseguró ante la prensa.

También resaltó que se había reconocido "el legítimo derecho a la defensa propia del pueblo sirio", pese a que tal formulación no se encuentra en las conclusiones.

Horas antes, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, había anunciado que "nadie podrá negar" este derecho si Al Asad no cede "y el Consejo de Seguridad de la ONU no asume su responsabilidad".

Las conclusiones de la conferencia tampoco recogen la opción de zonas desmilitarizadas o de exclusión aérea que pasarían al control del Ejército Sirio Libre (ESL), como había pedido Ghaliun durante la reunión.

Pero sí incluye un compromiso claro de hacer llegar de forma urgente ayuda humanitaria, con independencia de las negociaciones políticas, un punto que Davutoglu expresó de forma algo más nítida que el documento oficial.

"Esta ayuda será coordinada por el grupo Amigos de Siria en colaboración con la ONU y emplearemos todas las vías posibles para enviarla. Esperaremos a lo que diga mañana Kofi Annan y después utilizaremos todas las alternativas, repito: todas las alternativas para ayudar al pueblo sirio", se comprometió el ministro.

También Clinton hizo una promesa concreta, al anunciar que Washington enviará equipos de comunicación a los activistas en Siria para que documenten la represión y hagan llegar esa información al exterior.

La tercera reunión de los "Amigos de Siria", grupo formado el 24 de febrero en la conferencia de Túnez, tendrá lugar en Francia, aunque de momento se desconoce la fecha exacta.

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