Santander, 8 mar.- Los sindicatos de todos los ámbitos de la administración autonómica y de las empresas públicas de Cantabria se han manifestado hoy en Santander para protestar por los recortes que ha aprobado el Ejecutivo autonómico en el sector público.
La manifestación, convocada por primera vez conjuntamente por los doce sindicatos que cuentan con representación en la administración pública de Cantabria (CCOO, UGT, ANPE, ATI, CSIF, SACS, SATSE, SIEP, STEC, TU, USAE y USO), ha sido secundada por unas 2.500 personas, según la Policía Local, y por 4.500 según los convocantes.
La protesta ha transcurrido por el centro de Santander tras una pancarta en la que se podía leer: "Lo público es de todos. No a los recortes del Gobierno de Cantabria".
La manifestación partió a las 19.00 horas de la plaza de Numancia, para dirigirse a la sede del Gobierno regional, donde la poeta cántabra Gloria Ruiz ha dado lectura a un manifiesto conjunto en el que se hace hincapié en que se necesitan unos servicios públicos "de todos y para todos", que "no estén inspirados en las reglas de mercado".
Los sindicatos afirman que, en nombre de los mercados, se está sometiendo a los servicios públicos a una "reducción sin paliativos", por una crisis que "empezó siendo financiera" y que "se ha convertido en crisis social y de valores".
En el manifiesto también se enfatiza que al ser las finanzas las que "gobiernan la economía, dirigen a los Estados y someten a sus pueblos", en España se está "asistiendo al nacimiento de un nuevo Estado, sin líderes conocidos y dirigentes sin rostro".
"Levantamos la voz contra los recortes, contra ese pésimo plan de ajustes del Gobierno de Cantabria que pretende enterrar los derechos sin que nadie pida la palabra", ha leído Gloria Ruiz.
El manifiesto recuerda que a los empleados públicos se les ha congelado el salario "tres años seguidos", se ha rebajado el sueldo un 5 por ciento, se ha congelado la oferta pública de empleo, se han subido los impuestos "de forma injusta e insolidaria" y, "por si fuera poco, aprueban una reforma laboral injusta, ineficaz e inútil".
Para los sindicatos, la reforma laboral "abre de par en par las puertas a la Administración para los despidos colectivos" y consideran que "no es aceptable que las causas para los despidos se identifiquen con la mera insuficiencia presupuestaria sobrevenida", que, a su juicio, "hace recaer sobre el personal laboral fijo la mala gestión del sistema de ingresos y gastos públicos".
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