Los países árabes trasladan al Gobierno español su rechazo a una misión militar en Libia

Madrid.- Los embajadores de los países árabes acreditados en Madrid han manifestado hoy a la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, su rechazo a que pueda haber una intervención militar en Libia para frenar la represión del líder Muamar el Gadafi.

Los diplomáticos árabes han trasladado este mensaje a Jiménez en el almuerzo que la ministra les ha ofrecido en un hotel madrileño para analizar el proceso de revueltas en el Magreb y en Oriente Próximo, en especial en Libia.

La comunidad internacional debería volcar sus esfuerzos en la ayuda humanitaria, pero sin que haya "ningún tipo de intervención militar extranjera, porque son los libios los que deben protagonizar el cambio", ha declarado a Efe uno de los embajadores asistentes a la reunión.

La única legación que no ha estado representada en el almuerzo ha sido Libia, cuyo embajador en España, Ajeli Abdussalam Ali Breni, permanece al lado del líder Muamar el Gadafi.

Ali Breni criticó la semana pasada a Jiménez por afirmar que Gadafi había perdido "toda la legitimidad" al bombardear a sus propios ciudadanos.

El diplomático libio respondió a la ministra que las revueltas en su país no eran protestas pacíficas, sino "operaciones de sabotaje realizadas por elementos de Al Qaeda".

Todos los demás países árabes han estado en la reunión, incluido el de Yemen, uno de los países donde las manifestaciones están siendo reprimidas con violencia.

Barein, otro de los Estados donde el régimen está siendo acosado por las protestas que piden más democracia, no tiene oficina en Madrid.

Catar y Sudán han estado representados por sus encargados de negocio, y la Liga Árabe, por el jefe de la misión en España.

Los embajadores han destacado el apoyo de España para lograr la paz y la estabilidad en el mundo árabe desde "el respeto del derecho internacional", según las fuentes.

Jiménez ha expresado el "firme compromiso con los procesos de modernización y reforma" emprendida por países como Egipto y Túnez, según informa el Ministerio de Exteriores en un comunicado.

Este respaldo quedó patente con la visita del jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de la propia Jiménez a Túnez ayer.

El Ejecutivo español no es partidario de una misión militar en Libia que no tenga el respaldo de Naciones Unidas.

La titular de Defensa, Carme Chacón, ha afirmado hoy que España quiere que el Consejo de Seguridad de la ONU apruebe una resolución que avale una eventual intervención de la OTAN que "de forma muy clara" tenga fines humanitarios.

En el almuerzo, también se ha hablado del proceso de paz entre Israel y Palestina, sobre el que Jiménez ha insistido en que la solución pasa por la negociación y la coexistencia de los dos estados.

Otro de los asuntos de debate ha sido la Unión por el Mediterráneo, impulsada por Francia en julio de 2008 para favorecer la cooperación entre ambas riberas.

Jiménez ha declarado estar "firme y profundamente comprometida" con esta iniciativa, que lleva un año bloqueada.