Kabul, 30 abr.- Dos niños afganos murieron ayer y otros dos resultaron heridos al estallar un artefacto explosivo, aparentemente un mina, que manipulaban después de desenterrarlo en el sureste de Afganistán, informó hoy a Efe una fuente oficial.
El suceso ocurrió en el distrito de Sarobi, en el este de la provincia de Paktika, y los menores heridos fueron ingresados en un hospital próximo, confirmó a Efe el portavoz del Gobierno provincial, Mukhles Afghan.
Según Afghan, uno de los niños se hallaba en un estado muy grave, por lo que fue trasladado después por las fuerzas de seguridad afganas al hospital de Bagram, localizado cerca de Kabul, en el interior de la base militar más importante de EE. UU. en el país.
Paktika está situada junto a la frontera con Pakistán, y es una de las regiones en las que cuentan con más presencia las milicias talibanes, que actúan en una franja territorial que recorre el sur y el este del país.
De acuerdo con las autoridades afganas, a lo largo del territorio del país asiático hay gran cantidad de artefactos todavía sin explotar, algunos de los cuales datan de la época de la invasión soviética en la década de 1980.
Los civiles son víctimas con frecuencia de las bombas situadas en el borde de los caminos y de los atentados suicidas de la insurgencia, o de bombardeos fallidos de las fuerzas de la OTAN.
El número de civiles muertos por la actual guerra en Afganistán alcanzó los 3.021 en 2011, según un informe de la misión de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA).
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