Nuevos choques policiales en Turquía por una tala de árboles

  • La tala de árboles para hacer sitio a nuevas infraestructuras vuelve a enfrentar al Gobierno y a la sociedad civil en Turquía, esta vez no en el famoso parque Gezi de Estambul, si no en el campus de una universidad de Ankara, informa hoy la prensa turca.

Estambul, 22 oct.- La tala de árboles para hacer sitio a nuevas infraestructuras vuelve a enfrentar al Gobierno y a la sociedad civil en Turquía, esta vez no en el famoso parque Gezi de Estambul, si no en el campus de una universidad de Ankara, informa hoy la prensa turca.

La construcción de una carretera a través del campus de la Universidad Técnica de Oriente Próximo (ODTÜ), aprobada por la municipalidad, empezó por sorpresa el viernes pasado, festivo por ser el último día de la Fiesta del Cordero musulmán, pero ya ha suscitado escenas similares a las vistas en Gezi el pasado junio.

Unos tres mil estudiantes marcharon ayer hacia los terrenos por los que transcurre el trazado de la carretera para plantar en ellos 5.000 arbolitos, pero pronto se vieron rodeados por unos 2.000 agentes de la Policía antidisturbios, relata el diario "Hürriyet".

Los uniformados acabaron dispersando a los estudiantes con la intervención de blindados y gas lacrimógeno y una persona fue detenida, añade el citado diario.

La municipalidad señala haber procedido a la tala o el arranque de 2.388 árboles, pero asegura haber pagado su valor, unos 80.000 euros a la Universidad.

Pero en un mensaje en la red social Twitter, el rectorado negó anoche haber llegado a acuerdo alguno con la municipalidad y anunció que el dinero se ha devuelto y que la institución tomará todas las medidas legales posibles para frenar el proyecto.

"Parece ser que algunas personas no han aprendido su lección", dijo al diario "Hürriyet Daily News" el embajador de la Unión Europea en Turquía, Jean-Maurice Ripert, en referencia a quienes tomaron la decisión de iniciar las obras sin buscar el acuerdo de la Universidad.

Las protestas de Gezi, que mantuvieron en vilo Turquía durante la mayor parte del verano y han influido profundamente en el panorama político, empezaron cuando la Policía desalojó violentamente a un pequeño grupo de ecologistas que intentaba proteger los árboles contra un proyecto urbanístico.

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