Puig deja Interior y aterriza en Empresa y Ocupación en un momento de colapso

  • El nuevo conseller de Empresa y Ocupación, Felip Puig, cuya gestión al frente de Interior ha sido una de las más polémicas del primer gobierno de Artur Mas, con voces que han pedido su dimisión hasta el último momento, se hace cargo ahora de un departamento marcado por el colapso económico.

Barcelona, 27 dic.- El nuevo conseller de Empresa y Ocupación, Felip Puig, cuya gestión al frente de Interior ha sido una de las más polémicas del primer gobierno de Artur Mas, con voces que han pedido su dimisión hasta el último momento, se hace cargo ahora de un departamento marcado por el colapso económico.

Puig, uno de los hombres fuertes de Artur Mas, conocido por su independentismo, sustituye en el cargo a Francesc Xavier Mena.

El nuevo titular de Empresa y Ocupación cuenta, a sus 54 años, con una prolongada carrera política, ya que además de sus dos años al frente de Interior, también ocupó las consejerías de Medio Ambiente (1999-2001) y Política Territorial y Obras Públicas (2001-2003) en el último gobierno de Jordi Pujol.

Para su primer y breve gobierno, Mas confió en Puig para uno de los cargos más complicados: el área de Interior, con la misión extra de marcar diferencias con el legado que el ecosocialista, Joan Saura había dejado en este departamento.

En estos dos años, el nombre de Puig ha sido un habitual en las portadas de los medios de comunicación catalanes y su gestión ha estado envuelta en sucesivas polémicas, como el desalojo de los indignados de la plaza Catalunya, el 27 de mayo de 2011, o la manifestación de este colectivo ante el Parlament unas semanas después.

En esta corta legislatura ha tenido que hacer frente además a dos huelgas generales en 2012, el 29 de marzo y el 14 de noviembre, en la que la actuación de los Mossos recibió fuertes críticas por parte de los convocantes de la movilizaciones.

Después de los graves disturbios registrados en la primera de ellas en el centro de Barcelona, la policía autonómica abrió una web de delación para que los ciudadanos identificaran a los sospechosos de haber participado en los actos de violencia callejera, un sitio en Internet que fue retirado un mes después.

Sin embargo, fue la información confusa aportada por Puig ante el Parlament sobre los incidentes registrados tras la huelga general del 14N, en el que una mujer perdió un ojo por un fuerte impacto -que la herida atribuye a un proyectil lanzado por un mosso- lo que levantó las mayores críticas sobre su gestión.

Por estos hechos, el conseller de Interior presentó su dimisión a Mas, aunque el presidente catalán no aceptó la renuncia.

Mostrar comentarios