Rajoy se lleva por primera vez la ejecutiva a Barcelona en apoyo del PPC

Madrid.- El líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, se llevará mañana a Barcelona, por primera vez, al Comité Ejecutivo Nacional en un nuevo gesto de apoyo a Alicia Sánchez Camacho, la candidata de su partido a las elecciones catalanas del 28 de noviembre.

Durante la reunión del máximo órgano de gobierno del PP en Barcelona, según han dicho a Efe fuentes del partido, se abordará, aparte de otras cuestiones, el asunto de los Presupuestos, sobre los que Rajoy ha hecho últimamente la diana de sus críticas y a los que ha calificado de "deprimentes".

Sin ir más lejos, ayer en Zaragoza volvió a censurar las cuentas públicas del año próximo porque, según dijo, suben "la deuda, el paro, los impuestos y bajan las políticas sociales y la inversión".

También, por imperativo de la actualidad, se prevé que los dirigentes populares analicen el resultado de las elecciones primarias que celebra hoy el PSOE en tres comunidades autónomas y once ayuntamientos.

Especialmente estudiarán cómo queda la candidatura socialista madrileña después de que los militantes elijan entre la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, y el líder del PSM, Tomás Gómez, para medirse con la presidenta, Esperanza Aguirre -miembro de la ejecutiva-, en mayo del año que viene.

Pero si las elecciones en Madrid puede preocupar más al PP en función del candidato socialista que salga esta noche de las urnas, la prioridad más inmediata son las catalanas puesto que apenas quedan dos meses.

Y es por este motivo por el que Mariano Rajoy viene reforzando en las últimas semanas su presencia en Cataluña, flanqueando a Alicia Sánchez Camacho. Antes de ayer mismo estuvo en Lleida, donde afirmó que veía las elecciones a la Generalitat como una "extraordinaria" oportunidad para hacer posible un cambio y acabar con el tripartito.

En Barcelona estuvo el pasado 18 de septiembre y allí dijo que Cataluña necesitaba un cambio y consideraba que el PP era un instrumento "imprescindible" para ese nuevo rumbo al ser garantía, según él, de "estabilidad, moderación y sentido común".

Pasó también por Lloret de Mar (Girona) tres días más tarde y advirtió de que el PP catalán, que prestó apoyo parlamentario a CiU en la última etapa de gobierno nacionalista en la Generalitat, no sería "la muleta de nadie" y dejó claro que su partido se oponía a cualquier cambio en la estructura del Estado.

La última reunión del Comité Ejecutivo Nacional, que se celebró en Santiago de Compostela el 6 de septiembre, sirvió al PP para abrir el nuevo curso político, en un encuentro que se centró en la preparación de las elecciones autonómicas y municipales.