Rubalcaba se ofrece como solución y Chacón quiere contar con los militantes

Madrid, 16 ene.- Los dos candidatos oficiales a liderar el PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, se han cruzado hoy en Andalucía en busca de apoyos y, mientras el primero se ha ofrecido como solución para el partido en un momento difícil, la ex ministra ha asegurado que no quiere contar militantes, sino contar con ellos.

Y es que, a una semana de que tengan que estar elegidos los delegados que participarán en el 38 congreso federal del PSOE, continúa la controversia en torno a los resultados en las asambleas locales que se están celebrando por todo el país.

Mientras fuentes del equipo de Chacón hablan de que se está extendiendo "la ola de Olula", en referencia a la localidad almeriense donde la ex ministra de Defensa presentó su candidatura el pasado día 7, en el entorno de Rubalcaba cuentan con ganar en 15 comunidades, así como en Ceuta y Melilla.

Excepto en Cataluña, donde la candidatura de Rubalcaba da por segura la victoria de los partidarios de Chacón, creen que el ex vicepresidente tiene aseguradas Galicia, Castilla y León, País Vasco, Asturias, Baleares, Murcia, Extremadura, Cantabria, Canarias, Castilla-La Mancha y la Comunidad valenciana, y no creen que haya problemas con Madrid y Andalucía.

Sin embargo, fuentes del equipo de Chacón han señalado que, con los últimos datos que están recibiendo de lugares como Canarias, la Comunidad valenciana, Castilla y León o Andalucía, están consolidando su primera posición.

En Madrid, según sus datos, los partidarios de Rubalcaba han ganado en 39 agrupaciones, frente a las 102 en las que han triunfado las listas afines al secretario general del PSM, Tomás Gómez, a quien ven cercano a Chacón aunque él no ha desvelado sus preferencias.

Durante una entrevista radiofónica, Rubalcaba ha justificado esta mañana su candidatura argumentando que se ve como "una persona útil" y "una solución en un momento muy difícil" para el PSOE, con ideas, experiencia y capacidad de aglutinar, como cree que ha acreditado en la campaña electoral.

A mediodía, en Murcia, antes de viajar a Granada, ha hecho hincapié en que el PSOE tiene la tarea fundamental de "recuperar" algo que ahora ha perdido: una voz común para decir lo mismo en todas partes.

Sin renegar de su pasado, se ha mostrado convencido de que el PSOE tiene que pilotar los cambios como ha hecho siempre y no adaptarse a ellos.

Rubalcaba ha estimado asimismo que el PSOE tiene que reflejar la mayoría social y tener en cuenta a los más desfavorecidos, pero sin olvidar a los millones de ciudadanos de las clases medias, creadas, según dijo, gracias a las políticas socialistas.

Mientras tanto, en Málaga Chacón ha considerado que, gane quien gane, los socialistas serán capaces de dar a ese partido "unidad y fuerza".

Desde su punto de vista, y tras la "avería" de las elecciones municipales, autonómicas y generales, Chacón ha apuntado que ahora hay dos alternativas: o mantener al partido en observación dos o tres años o llevar "el coche" al taller cuanto antes para que "coja velocidad" y volver a ganar la confianza de los españoles, empezando por Andalucía el 25 de marzo.

Pese a que buena parte de su discurso la ha centrado en arremeter contra el PP y en advertir de los nuevos "hachazos" que prepara el Gobierno para después de los comicios andaluces, Chacón ha apostado por recargar el PSOE y por rearmarlo de pensamiento.

Frente a aquellos compañeros suyos que "quieren contar militantes", ella se ha comprometido "a que los militantes cuenten" en un partido en el que "no sobra nadie", porque su deseo al concurrir a la secretaría general es ganar al abatimiento, la resignación, la frustración y al PP.

Los defensores de una y otra candidatura también están de gira por España y hoy ha recalado en su ciudad de adopción -Alicante- la ex ministra de Sanidad Leire Pajín, para quien Chacón "está cargada de futuro" y "posee las cualidades para recuperar la ilusión y la fortaleza en el PSOE".

En cambio, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha confirmado su apoyo a Rubalcaba, pero no por ser amigo suyo, sino por la coincidencia de planteamientos, y ha pedido "respeto máximo" a todas las posiciones que surjan.