"Somos amigos. Nos unen unas fuertes raíces históricas y lo que es más importante compartimos la voluntad de promover los principios de los derechos humanos". Con estas palabras, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comenzaba su discurso ante los medios de comunicación después de reunirse en La Moncloa con su homólogo en Estados Unidos, Joe Biden. El máximo responsable del Ejecutivo español ha señalado que en los "planes de recuperación" de ambos países se observa "una excelente oportunidad para las empresas españolas en EEUU. Agradezco al presidente Biden su papel para reconducir las relaciones comerciales trasatlánticas, lo que ha permitido solucionar las diferencias pasadas para mirar al futuro con esperanza".
Así, Sánchez ha anunciado la actualización del acuerdo con EEUU que se rubricó hace dos décadas: "Tras más de veinte años de la declaración firmada en el año 2001, es evidente que numerosas transformaciones en el orden internacional han afectado a las relaciones europeas y trasatlánticas". "Estoy satisfecho de la nueva declaración conjunta", ha apostillado el presidente, para añadir que ambos países se han comprometido a profundizar en materia de defensa, como es el caso del aumento de la presencia de EEUU en la base de Rota. Los mandatarios estadounidense y español han reafirmado su compromiso con el acuerdo militar sellado en el año 1988, que permite el uso compartido de las bases de Morón (Sevilla) y Rota y que califican como "una pieza fundamental" de la cooperación bilateral. Rota contará contará con dos destructores más que se sumarían a los cuatro ya permanentes en la base española.
Este aumento de las capacidades militares de Estados Unidos en España -que elevará en unos 600 los efectivos estadounidenses en Rota- obligará a reformar el convenio de cooperación, que tendrá que pasar por el Consejo de Ministros y ser aprobado por el Congreso de los Diputados. Biden y Sánchez también han formalizado su intención de celebrar reuniones "regulares" para "fortalecer la cooperación bilateral" en materia de defensa y han reconocido la "centralidad" de la OTAN para "garantizar la paz y la seguridad transatlánticas". Con ello, la declaración conjunta marca el compromiso de ambos países para proporcionar a la OTAN capacidades y fuerzas alistadas, fortalecer sus lazos transatlánticos y "garantizar un enfoque de seguridad de 360 grados".
Por su parte, el líder norteamericano ha calificado de "muy cálida" la conversación con Sánchez. "Hoy estamos juntos para defender nuestra seguridad compartida y enfatizarla, fortaleciendo nuestra alianza y respondiendo al reto que afrontamos". "Estamos unidos para apoyar a Ucrania y mejorar nuestras propias capacidades de disuasión y defensa", ha remachado Biden, quien ha agregado que desde el comienzo de la invasión, EEUU ha consolidado su postura de fuerza en Europa y respondido al nuevo ambiente de seguridad. El aumento de la presencia naval de Estados Unidos en España ya fue adelantado hace más de dos años por la Administración de Donald Trump, según revelaba en el año 2020 -y recoge Europa Press-, el general Tod Daniel Wolters, mando de las fuerzas militares norteamericanas en Europa, ante el Comité de Servicios Militares del Senado.
Por su parte, el presidente del Gobierno ha añadido que también se ha pactado "estrechar lazos en los ámbitos de la justicia, ciberseguridad, seguridad energética y de llegada de GNL". En definitiva, ha insistido, "se expanden y refuerzan nuestras relaciones bilaterales". Otro de los pactos que Sánchez y Biden han alcanzado ha sido el de la necesidad de cooperación permanentemente para hacer frente a la inmigración irregular en el norte de África. España y Estados Unidos han reconocido "la importancia de una cooperación permanente en respuesta a los retos de la migración irregular en la región del norte de África".
Además ambos países han dejado por escrito su intención de colaborar en un enfoque integral para la gestión de los flujos migratorios irregulares "que garantice un trato justo y humano de los migrantes", señala el texto. En este sentido los dos países han acordado coordinar esfuerzos para abordar las causas fundamentales de la migración irregular y trabajar para fortalecer las vías legales con especial énfasis en los países de América Latina y el Caribe.
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