El curso político empieza en el Congreso como acabó el anterior: con Gobierno y PP aún más distanciados si cabe de cara a la negociación en ciernes de las grandes reformas económicas. Los diagnósticos y las soluciones mirando a la recuperación están enfrentadas y así lo demostraron las dos bancadas en la primera sesión de control tras el parón estival. El recibo de la luz se ha sumado a la retahila de reproches mutuos entre los que no han desaparecido la Mesa bilateral con la Generalitat y el CGPJ.
Casado ve al Gobierno débil y lo ha calificado como "el más radical de la historia". A Sánchez lo ha llamado "presidente fallido", definiéndole como "el principal problema de España". Los acuerdos ni están ni se les esperan. El líder del principal partido de la oposición ha echado mano del problema de la luz para pedir al presidente del Gobierno que salga de "su palacio" y "resuelve la crisis económica y social".
Sánchez, que este martes tomó una de las decisiones que marcarán su futuro político con el 'decreto Ribera', quiere que el PP "arrime el hombro" de cara a esa recuperación "justa". Es un brindis al sol. Les separa un abismo y la legislatura entra ahora en un periodo preelectoral donde los acercamientos se antojan más complicados. El jefe del Ejecutivo ha defendido que las decisiones aprobadas en Consejo de Ministros buscan "el interés de los ciudadanos" y ha insistido en que no son "confiscatorias".
El encontronazo entre Sánchez y Casado por la luz ha continuado con Cuca Gamarra y Nadia Calviño y con Guillermo Mariscal y Teresa Ribera. La vicepresidenta primera ha cobrado un nuevo protagonismo tras la remodelación gubernamental y ya tiene un perfil más político. La portavoz del PP en el Congreso ha pedido al Gobierno que "deje de amenazar a las empresas" y ha destacado que España, según las previsiones, será "la última economía de la OCDE en recuperarse".
Calviño, que va a ir incorporando esos argumentos más políticos a sus fichas desde este curso, ha defendido la "recuperación justa" y ha hablado de medidas necesarias para atajar el rally de la factura de la electricidad. Un ejemplo: "Ustedes no defienden el interés general, atacan la imagen e interés de España en los foros internacionales. Espero que pronto empiecen a sumar y dejen de dividir".
Rufián, a Sánchez: "Somos políticos, no contratistas de AENA"
Lo que no cambia en este periodo de sesiones es el enfrentamiento que van a seguir protagonizando Teodoro García Egea y la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz. El secretario general del PP ha hablado de la "miseria social" que provocan las políticas del Gobierno y ha preguntado a la líder de la parte morada en el Gobierno qué tendría que hacer con la luz subiendo un 200%. Díaz, por su parte, ha recordado las decisiones del PP en materia de energía, calificándolas como "nefasta gestión".
La primera sesión de control también ha sido escenario de un 'cara a cara' entre Sánchez y ERC por otro de los problemas que ha tenido que hacer frente el Gobierno en este inicio de curso: la ampliación fallida del aeropuerto de El Prat. Gabriel Rufián ha vuelto a reafirmar el 'no' de los republicanos al proyecto afirmando que "somo políticos, no contratistas de AENA". El presidente, por su parte, le ha reclamado volver al acuerdo del 2 de agosto, donde todo parecía cerrado y ha tirado de ironía a escasas horas de encontrarse en Cataluña con Pere Aragonès: "Todos estamos divididos, salvo el Govern".
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