Secretaría Honduras dice que agentes son responsables de muerte estudiantes

  • La Secretaría de Seguridad de Honduras informó hoy que, según las investigaciones, cuatro agentes policiales serían los responsables de la muerte de dos universitarios cuyos cadáveres fueron hallados el pasado día 22 en las cercanías de Tegucigalpa.

Tegucigalpa, 29 oct.- La Secretaría de Seguridad de Honduras informó hoy que, según las investigaciones, cuatro agentes policiales serían los responsables de la muerte de dos universitarios cuyos cadáveres fueron hallados el pasado día 22 en las cercanías de Tegucigalpa.

"No queda duda de la participación de malos compañeros en ese hecho", subrayó el portavoz Silvio Inestroza, quien indicó a periodistas que el hecho habría tenido su origen después de que los estudiantes, que se conducían en un automóvil, no obedecieran un requerimiento que les hicieron los policías.

Las víctimas son Carlos Pineda Rodríguez y Rafael Alejandro Vargas Castellanos, hijo de la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos.

Inestroza indicó que, según la información recabada hasta ahora, al parecer los estudiantes fueron perseguidos por una patrulla y que los policías les dispararon, en vez de pedir refuerzos para interceptarlos.

"Al enterarse de que los jóvenes estaban heridos, sucedió lo que ya se sabe", añadió la misma fuente.

Los cuerpos de Pineda Rodríguez, quien estudiaba leyes, y Vargas Castellanos, estudiante de sociología, fueron hallados con varios impactos de bala en la madrugada del 22 de octubre a unos pocos kilómetros de la carretera que de Tegucigalpa conduce al sur de Honduras.

Los universitarios habían estado cenando el viernes 21 en la casa de una amiga, según informaron sus familiares la semana pasada.

Otra fuente de la Secretaría de Seguridad, el oficial Rommel Martínez, dijo a periodistas que los presuntos responsables de la muerte de los dos universitarios son el subinspector Carlos Galeas, y los agentes Wilfredo Figueroa, conductor la patrulla; Arnulfo Padilla (operador) y José Rubén Pozo (policía de apoyo).

Los cuatro presuntos responsables del crimen están bajo custodia de la Policía, a la espera de las acciones que emprenderá el Ministerio Público.

Según el comisionado César Somoza, la investigación ha llevado a obtener "evidencias y confesiones", mientras que las pruebas criminalísticas "indican la responsabilidad de los policías".

"Científicamente ha sido demostrado", enfatizó Somoza en declaraciones a la prensa.

Honduras vive una ola de violencia que a diario está dejando un promedio de 20 muertos.

Un reciente informe de las Naciones Unidas coincide con otro del Observatorio de la Violencia de la UNAH, en el sentido de que en el país centroamericano la tasa de homicidios ha llegado a 82 por cada 100.000 habitantes.

La rectora de la UNAH, fundadora hace unos pocos años del Observatorio de la Violencia, indicó el pasado jueves que hacia 2004 la tasa de homicidios era de 37 por cada 100.000 habitantes.

Castellanos recordó en una manifestación de solidaridad de centenares de estudiantes el pasado jueves, que el Observatorio de la Violencia de la UNAH le ha señalado a las autoridades dónde se cometen los delitos, las zonas inseguras, las horas en que ocurren los crímenes, para que analicen, y otra información.

"Ahora les toca a ellos (las autoridades) tomar las decisiones, no con maquillajes, sino con acciones que vayan al fondo de los problemas", recalcó Castellanos.

"Los niveles de violencia que el país tiene es responsabilidad de las autoridades que no toman decisiones. No podemos culpar a nadie más", acotó la rectora de la UNAH, quien además considera que el país puede revertir la alta tasa de criminalidad.

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