Ginebra, 18 dic.- El Gobierno suizo anunció hoy que mantendrá congelados 700 millones de francos (573 millones de euros) que pertenecían al exdictador egipcio Hosni Mubarak y otros 60 millones de francos (49 millones de euros) del expresidente de Túnez Ben Ali.
Suiza ordenó a principios de 2011, de forma preventiva y por un periodo inicial de tres años, el bloqueo de los fondos que ambos dirigentes políticos y otras personas de su entorno y con influencia política tenían en bancos suizos.
Al cumplirse dentro de pocas semanas el primer trienio, las autoridades helvéticas comunicaron hoy que han decidido extender esa medida tres años más con el fin de dar a Egipto y a Túnez el tiempo para avanzar en las investigaciones penales que podrían permitirles demostrar el origen ilícito de ese dinero y recuperarlo.
El tiempo suplementario otorgado también tiene en cuenta "las mutaciones políticas ocurridas en ambos países", informó el Ministerio suizo de Asuntos Exteriores.
El bloqueo de los fondos impide asimismo que salgan del país para ser "disimulados" en otras plazas financieras, con el fin de escapar al control de la justicia, agregó la misma fuente.
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