Valeriano gómez insta a las organizaciones sindicales y empresariales a auditar todas sus cuentas

El exministro de Trabajo y actual portavoz económico del PSOE en el Congreso, Valeriano Gómez, instó este martes a las organizaciones sindicales y empresariales a que sometan a auditoría todas sus cuentas, y no sólo la parte cubierta con fondos públicos.
En su intervención en el curso 'Competitividad y Marca España', organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en la UIMP de Santander, Gómez defendió que tanto estas organizaciones, como los partidos políticos y todas las instituciones que tienen financiación procedente de los presupuestos del Estado "deben someter sus cuentas públicas y actividades financieras a auditoría".
En este sentido, añadió que esta auditoría no debería centrarse en "las acciones sometidas a financiación pública", sino "el conjunto de su actividad", incluida la parte cubierta con las cuotas de sus afiliados.
En cuanto a la situación que atraviesa España, Gómez criticó que el país está recuperando competitividad "de forma pasiva", es decir, mediante "ajustes en el mercado de trabajo y en el empleo".
A pesar del "buen comportamiento" del empleo en mayo, el portavoz económico del PSOE recordó que la afiliación a la Seguridad Social sigue siendo inferior a la registrada el término de 2012.
Sí que admitió que hay un dato "esperanzador", que es la reducción en el ritmo de crecimiento de las solicitudes de prestaciones por desempleo, aunque señaló que las altas siguen siendo "muchas más" que las registradas en el año 2009, "cuando la crisis fue más intensa".
También sostuvo que la reducción de los costes laborales, con una caída unitaria del 20%, se corresponde con el empleo que se ha destruido en los últimos años, lo que demuestra que la ganancia de competitividad se ha logrado "fundamentalmente por la intensa destrucción de empleo", especialmente en el sector de la construcción.
Por otro lado, criticó que se ha vuelto a una cifra de despidos "que no se conocía desde el año 2009" y que en parte es imputable a la reforma laboral.
Además, considera que este crecimiento en los despidos se debe a que los empresarios retrasaron estas medidas hasta la entrada en vigor de la reforma, lo que provocó que en 2012 la cifra de despidos fuese similar a la de 2011 a pesar de que la caída de la economía fue casi el doble.
En cuanto a la temporalidad, explicó que se ha situado en el nivel más bajo desde el año 1989 por la "caída intensa" de sectores con mayores tasas, como la construcción. Esto demuestra, según Gómez, que el elevado nivel de temporalidad de la economía española estaba relacionado con el modelo productivo "y no tanto con las instituciones laborales".
Por último, criticó al Banco de España por proponer la exclusión de algunos colectivos del suelo que supone el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), y también a los que quieren excluir a mayores sectores de la negociación colectiva.