Las protestas políticas en Hong Kong, donde los manifestantes han llegado a paralizar el aeropuerto internacional de Chek Lap Kok, y las amenazas veladas de China, han dado un motivo más de incertidumbre a los mercados globales, y han desencadenado un cierre a la baja en Asia, todavía pendiente de la guerra comercial entre EEUU y China. El índice Hang Seng hongkonés ha perdido algo más del 2% y es el selectivo que peor sale parado de toda la zona.
El Nikkei de Tokio, cerrado la jornada previa al celebrarse en Japón la fiesta de la Montaña, ha retrocedido algo más del 1% hasta los 20.455 puntos. Mientras, el Kospi surcoreano retrocede un 0,85% y los índices chinos hacen lo propio, con recortes del 0,74% para el de Shangai y del 1,15% para el China A50.
En el mercado de divisas, el yuan chino mantiene su cambio frente al dólar por encima de 7 unidades, sin que de momento el Banco Central del país haya vuelto a hacer ningún nuevo anuncio. Mientras, el yen japonés cotiza en zona de mínimos anuales en 105,314 unidades por cada dólar.
En el mercado de materias primas, la incertidumbre mundial no sienta nada bien al petróleo, menos cuando organismos como la Agencia Internacional de la Energía (AIE) han advertido de que la demanda a nivel mundial sufrirá un retroceso notable el año próximo. Así, los futuros del Brent para entrega en octubre, que son la referencia a nivel europeo, caen hasta 58,16 dólares; mientras que el barril de crudo ligero West Texas se paga a 54,6 dólares.
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