El Partido Conservador y Unionista está al borde de la guerra civil, después de que el primer ministro británico, Boris Johnson, acusase este domingo a sus compañeros de partido que amenazan con rebelarse en el Parlamento contra de un Brexit sin acuerdo de estar minando su negociación ante la Unión Europea (UE). De hecho, ha llegado a plantear una purga interna para quienes voten contra el Brexit 'duro' en la sesión parlamentaria prevista esta semana.
Ante la posibilidad de que parte de sus diputados voten en el Parlamento a favor de bloquear una salida sin acuerdo, Johnson les advirtió de que estarían posicionando en contra del mandato popular para abandonar la UE que salió el referéndum de junio de 2016, en una entrevista publicada en el diario 'The Sunday Times'
"Lo único que podría socavar la capacidad de negociación del Reino Unido sería que Bruselas piense que hay alguna posibilidad de que el referéndum pueda cancelarse y el Brexit pueda bloquearse", señalaba Johnson. El primer ministro confía en convencer a Bruselas de retirar del acuerdo de salida la polémica salvaguarda para asegurar que no haya una frontera en Irlanda del Norte tras el Brexit, aunque sus 27 socios comunitarios restantes se han mantenido hasta ahora inflexible en ese punto.
Si no ha logrado renegociar el acuerdo el 31 de octubre, la fecha límite para materializar el Brexit, Johnson asegura que romperá igualmente los lazos con la UE, un escenario que puede tener consecuencias económicas terriblemente negativas tanto para el Reino Unido como para el bloque europeo, tal y como señalan analistas y expertos desde que comenzara el proceso de desconexión hace tres años.
"Le digo a todo el mundo en este país, incluidos todos los del Parlamento, la decisión principal es esta: ¿Os vais a alinear con Jeremy Corbyn (líder laborista) y aquellos que quieren anular el referéndum?", declaraba el primer ministro en la citada entrevista. Y precisamente Corbyn, protagonista de la multitudinaria manifestación contra Boris Johnson del pasado sábado, ha recogido el guante y este lunes ha vuelto a exigir elecciones generales en Reino Unido para formar un Gobierno alternativo capaz de arribar el Brexit a buen puerto.
En este sentido, Corbyn ha explicado que hará todo lo posible para frenar el Brexit sin acuerdo, pasando por el bloqueo legislativo impulsado en el Parlamento británico para frenar el plan de Boris Johnson. Y, en caso de aprobarse esta ley esta semana, plantearía inmediatamente elecciones generales. También ha vuelto a pedir a la oposición y los diputados díscolos del Partido Conservador su apoyo para sacar adelante una moción de censura contra el actual primer ministro.
Corbyn ha prometido un segundo referéndum, en caso de llegar a Downing Street, que incluiría dos opciones: quedarse en la UE o salir de ella, explicitando de qué modo concreto se articularía la retirada del bloque comunitario. Una segunda opción que sería decidida en el Parlamento para evitar el estancamiento actual del proceso.
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