Polémica por un escape room que invita a salvar, encarcelar o matar a Macron

La moda del 'escape room' no cesa por mucho tiempo que pasen. Eso sí, los usuarios son cada vez más exigentes y reclaman nuevas pruebas, más intrigas, mejores espectáculos... En Francia uno de ellos se ha convertido en el más comentado por su polémica última prueba. La sala, en Toulouse, pone en manos de los participantes la vida de Emmanuel Macron. Tras más de una hora resolviendo pruebas la traca final llega con un maniquí atado a una silla que representa al presidente de la República. Llegados a ese punto lo pueden liberar, encarcelar o ejecutar.

La encargada del espectáculo no considera que se trate de algo de mal gusto, defendiendo el derecho a la sátira. En declaraciones a la televisión ha asegurado que solo se trata de una forma de cuestionar al gobierno, no de incitar a la violencia. 

Y hace una llamada a la reflexión: "Si la mayoría de los jugadores matan al presidente deberíamos empezar a hacernos preguntas".  Según recogen medios locales, habría sido víctima de amenazas e insultos en los últimos días. Hay algunos usuarios que también han solicitado el cierre de la polémica sala. 

En el juego, indicado para grupos de 3 a ocho jugadores y cuya duración se estima sea de 75 minutos, se juega con la idea de que los anarquistas han secuestrado al presidente de la República y el Gobierno francés ofrece hasta un millón de euros para encontrarlo. Una vez localizado es cuando deja libertad para decidir su futuro.